Juan Orol

De la redacción de razacero.

Juan Rogelio García García, conocido en el ambiente artístico como Juan Orol, actor, director, productor, guionista y argumentista nació en Pontevedra, España, el 4 de agosto de 1893. Debido a problemas económicos, la familia de Juan Orol decidió emigrar a la isla de Cuba. Siendo un adolescente, Juan Orol emprendió un viaje a la Ciudad de México, pero al encontrase con la Revolución regresó a la isla donde desempeñó infinidad de empleos, como mecánico, corredor de autos, beisbolista, boxeador, reportero y policía, entre otros. A sus 20 años regresó a la Ciudad de México, y con el nombre de “Esparterito” inició otra de tantas actividades, la de torero, que le permitió conocer parte de Sudamérica.

PÁG. 8 (2). Juan Orol con Mary Esquivel.
Juan Orol con Mary Esquivel.

En 1930 ingresó a la radiodifusora patrocinada por el Partido Nacional Revolucionario, la XEO, como publicista y director artístico. Esta labor le dio la oportunidad de relacionarse con gente de este medio, lo que le permitió más tarde incursionar en la industria fílmica. Conoció a Quirico Michelena y le compró el argumento de “Sagrario”, cinta que inició rodaje el 21 de julio de 1933. Con la compra del argumento decidió invertir y fundó la empresa “Aspa Films de México”.

En 1943 filmó su ópera prima, “Madre querida”, película que lo hace famoso y lo consolida en el mundo fílmico mexicano. Se inicia entonces de manera formal una de las más singulares carreras cinematográficas.

Orol filmó también en Puerto Rico, Estados Unidos y España. La primera producción que Orol hace para el cine cubano es la cinta “Siboney”, en 1938. Juan Orol ejerce de director, productor, guionista y actor. En ella debutó la rumbera cubana María Antonieta Pons. A pesar de que María Antonieta y sus demás musas posteriores fueron estrellas exclusivas de la España Sono Films, Orol les permitía trabajar con otras casas productoras.

María Antonieta Pons es la primera gran rumbera del Cine Mexicano, por esta razón, se considera a Orol uno de los principales promotores del llamado Cine de Rumberas de los años cuarenta y cincuenta. Con Pons como estrella, Orol realiza cintas como “Cruel destino” y “Embrujo antillano”, esta última, un intento del director de incursionar en la industria fílmica estadounidense. La última cinta de la mancuerna Orol-Pons fue “Pasiones tormentosas”.

PÁG. 8 (3).Tras su ruptura con Pons, Orol realizó “El amor de mi bohío”, estelarizada por la costarricense Yadira Jiménez en el papel principal. Al no encontrar a su futura estrella, Orol decide volver a México, cuando gracias a su publirrelacionista en Cuba descubre a Rosa Carmina, quien debuta en la cinta “Una mujer de Oriente”, en 1946. Rosa Carmina es la musa más representativa y prolífica de Orol. Con ella realiza 16 filmes entre 1946 y 1955. Una de sus primeras cintas con su nueva estrella es “El reino de los gángsters”, en 1947, donde hace aparición el personaje más emblemático de la faceta de Orol como actor: el gángster Johnny Carmenta. Interpretando a Carmenta, y con Rosa Carmina como estrella femenina, Orol filma el que es probablemente su filme más recordado: “Gángsters contra charros”. Esta cinta es considerada hoy en día como una película de culto, y cuenta con un lugar relevante en varias filmotecas del mundo.

Juan Orol conoce a su última musa: la bailarina mexicana Dinorah Judith, con la que realiza las cintas de su última etapa como director. En esta época, el cine de Orol fue destrozado por la crítica, y según se dice, el director atravesó por una fuerte depresión. Entre sus últimos filmes relevantes se encuentran “La maldición de mi raza”, “Antesala de la silla eléctrica” y el clásico de culto “El fantástico mundo de los hippies”, en 1970.

En 1981 se despidió del cine debido a su avanzada edad, y él mismo aseveró: “Ya no estoy para andar en el jaleo, me siento cansado, mi edad no es para menos, el cine requiere de fuerzas para andar de un lado a otro, ordenar, dirigir, buscar nuevas cosas para hacer algo diferente; se fueron los años mozos, hoy me retiro”.

Juan Orol murió en la Ciudad de México el 26 de mayo de 1988, arruinado y solo, después de haberse casado cinco veces.

Sin proponérselo, Juan Orol se convirtió en uno de los principales íconos del cine surrealista en México.

Juan Orol fue el principal promotor del Cine de Rumberas de la Época de Oro del Cine Mexicano, y también fue conocido como El Rey del Cine Negro o Cine de Gángsters.