Durango: Rosendo Salgado, el mamarracho de AMLO

Fernando Miranda Servín.

A principios de marzo pasado, un nutrido grupo de integrantes de la sociedad civil y de organizaciones sociales de varios estados de la República se dieron cita en Durango para anunciar el lanzamiento del proyecto llamado Esperanza Ciudadana, coordinado en esta entidad norteña por el conocido político Carlos Medina Alemán, militante del partido Morena en Durango.

“La idea es invitar a la sociedad civil, a intelectuales, empresarios, trabajadores, amas de casa, etc., a que se unan al gran proyecto de nación que está proponiendo Andrés Manuel López Obrador y que no necesariamente quieren pertenecer a un partido”, manifestó Carlos Medina Alemán.

Así las cosas, se entiende que el proyecto Esperanza Ciudadana nace al margen del partido Morena para buscar un mismo fin: apoyar la candidatura de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de México en las ya cercanas elecciones de 2018.

El Secretario General de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, el pasado 5 de marzo con ciudadanos duranguenses y representantes de organizaciones sociales, dándole el banderazo al proyecto "Esperanza Ciudadana", para apoyar a AMLO en el 2018.
El Secretario General de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, el pasado 5 de marzo con ciudadanos duranguenses y representantes de organizaciones sociales, dándole el banderazo al proyecto “Esperanza Ciudadana”, para apoyar a AMLO en el 2018.

A este evento también acudieron ciudadanos de 15 municipios de Durango y reconocidos líderes sociales y políticos, entre los cuales destacaron Víctor Castillo Martínez, dirigente del Frente Nacional para el Desarrollo Emiliano Zapata (FNADEZ), y el líder histórico del movimiento El Barzón y actual Secretario General del partido Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, para darle el espaldarazo y reconocimiento a esta naciente organización.

Pero hoy, a quince días de este evento, el personaje sórdido que impuso Andrés Manuel López Obrador desde finales de 2015 como “dirigente estatal de Morena en Durango”, Rosendo Salgado Vázquez, citó a rueda de prensa para “alertar a la ciudadanía” diciendo ante los medios de comunicación locales que “Esperanza Ciudadana no pertenece al partido Morena por lo que pedimos a la ciudadanía no dejarse engañar”.

Con esta postura poco inteligente, el personero de López Obrador en Durango, aparte de estar ventilando públicamente la división que se sigue viviendo en su partido entre sus militantes, está mandando el mensaje a la ciudadanía de que no es bienvenido a Morena el apoyo de esos sectores sociales importantes que podrían en un momento dado ser de mucho más peso que el mermado voto duro que tiene este partido en Durango, si es que acaso tiene voto duro, ya que en las pasadas elecciones del 5 de junio, Morena, bajo la “conducción” de Rosendo Salgado Vázquez, estuvo a punto de perder el registro.

El testarudo santón izquierdista con Rosendo Salgado Vázquez. "Andrés Manuel López Obrador lo impuso como dirigente estatal de Morena en Durango por los tratos oscuros que tiene con su hermano Rigoberto Salgado y para protegerlo por las cuentas pendientes que tiene en la Ciudad de México", revelan militantes de este partido.
El testarudo santón izquierdista con Rosendo Salgado Vázquez. “Andrés Manuel López Obrador lo impuso como dirigente estatal de Morena en Durango por los tratos oscuros que tiene con su hermano Rigoberto Salgado y para protegerlo por las cuentas pendientes que tiene en la Ciudad de México”, revelan militantes de este partido.

Ante este panorama, el “dirigente estatal” del partido de AMLO, Rosendo Salgado Vázquez, hermano del corrupto jefe delegacional de Tláhuac, Rigoberto Salgado Vázquez, por un lado prefiere darle la bienvenida a su franquicia llamada Morena a lo peor del PRI duranguense que últimamente ha estado emigrando a este partido, y por otro lado ha optado por desconocer, desprestigiar y rechazar la participación de ciudadanos honestos y organizaciones políticas combativas, que bajo el sello de Esperanza Ciudadana podrían acarrear muchísimos votos no solo para Andrés Manuel López Obrador sino también para no pocos oportunistas que a través suyo conseguirán candidaturas para colgarse de AMLO y contender por algún puesto en el proceso electoral de 2018, con altas posibilidades de triunfo.

Es indudable que este “dirigente estatal” de Morena obtuso y flojonazo se está viendo desplazado por el nulo trabajo que ha desempeñado en los últimos meses, y ya sintió las arenas movedizas bajo sus pies ante la labor política que ha hecho su contraparte Carlos Medina Alemán.

Pero lo que llama la atención es la actitud desaseada del jerarca morenista López Obrador, de mantener en el cargo de “dirigente estatal” a un sujeto con estas características, sobre quien pesan acusaciones de privación ilegal de la libertad en Durango y fraudes mercantiles perpetrados en la Ciudad de México, amén de haber convertido en un auténtico tugurio a la sede de su partido en esta entidad norteña.