¿Cómo lo quiere, joven?

¿Nos vestimos para exponer en realidad quiénes somos, o nos estamos disfrazando para ocultarnos? ¿Nos vestimos para exaltar nuestra autenticidad, o sólo para sentirnos más bellos?

Ese es el tipo de preguntas que nos podemos llegar a hacer en cuanto a la ropa que nos ponemos.

Hay un test que hago generalmente a las mujeres en mis cursos, cuya pregunta principal es ¿para quién se visten las mujeres? Y la respuesta es que lo hacen para ellas mismas. Por supuesto, también aplica a los hombres, ya que a nosotros se nos considera más “desenfadados” o que buscamos nuestra comodidad antes del estilo o la moda.

Dependiendo de nuestra profesión nos vestimos para ello, ya que cuando nos vestimos apropiadamente nos sentimos seguros y confiados.

Pero, ¿la ropa nos ayuda a mejorar nuestro estado de ánimo? Pues sí, esto es porque la ropa no se encarga nada más de vestirnos, si no que persuade y manipula nuestros procesos mentales.

En estos complicados momentos que estamos atravesando y que todo nuestro entorno ha cambiado (ojalá sea temporal), el quedarnos en casa ya forma parte de nuestra rutina diaria, y eso hace que utilicemos solo el diez por ciento de las prendas que tenemos en nuestro guardarropa, esto tal vez debido al estrés que estamos viviendo, pero el usar con bastante frecuencia el mismo par de jeans y la misma camiseta comenzará a molestarte inconscientemente y podría llevarte poco a poco a una leve depresión, y en estos días es justo lo que debemos evitar.

Young man working with laptop and mobile phone at his home office ...

¡Créeme, no todo está perdido! La recomendación número uno es vestir siempre bien, esto no significa que debas andar con ropa formal todo el día en tu casa para realizar tus actividades de home office, si no que elijas tu ropa un día antes pensando en las diferentes tareas que harás desde el hogar, por lo que añade color a tus prendas, recordando que los tonos que elijas van a influir más de lo que te imaginas en tu estado de ánimo, ya que tienen un efecto antidepresivo, por lo que utiliza colores como el azul, que transmite creatividad, tranquilidad y espiritualidad, o el rosa, que tiene un efecto de paciencia, calma y disminuye la tensión.

Otros colores a usar son el naranja y el verde, puesto que irradian dinamismo y positividad, al igual que todos los colores fuertes, dejando de lado el color rojo, ya que este es demasiado intenso y a la hora de realizar tu trabajo a través de una pantalla puede tener una respuesta contraria para tus objetivos.

Una actividad cotidiana que también ha cambiado es el ir a cortarnos el cabello, por tanto, ¿qué puedes hacer? Tienes dos opciones: esperar y andar como Robinson Crusoe o aprender a cortártelo tú solo. Si te decides por la segunda opción debes tener paciencia, el tiempo ya lo tienes. De preferencia ten a la mano dos espejos, uno con el que te estarás viendo cómo vas y el otro (por si eres aventado) para cuando tengas que reflejar la parte trasera de tu cabeza, así podrás delinear el contorno de tu cabello.

Everyone's buzzing about virtual haircuts

¿Listo para experimentar y practicar? Lo primero que debes tener es un kit para cortar el cabello, que incluya una máquina, preferentemente inalámbrica, ya que así no tendrás que preocuparte por el cable y tú atención estará directamente en tu labor de estilista y en las diferentes peinetas (son las plaquitas negras que se incrustan en la máquina), que van del número uno al ocho.

Lo recomendable es que por la falta de experiencia y la nula práctica comiences a usar la máquina con el cabello seco, bien peinado, para que conozcas la forma de tu cabeza y sepas hacia dónde crece (procura no tener ningún tipo de producto en tu cabellera). Empieza usando la peineta del número más alto y siempre comienza por las patillas, luego por los lados y al último por el frente (recuerda que este debe quedar más largo que el de los lados). Si tienes algún temor, que vaya que es normal, puedes apoyarte viendo algunos tutoriales y siguiendo los pasos como te lo marcan en el video.

Y si te gustan los cambios, prueba con las diferentes numeraciones de peinetas, al fin que el cabello crece. Recuerda, tienes el tiempo, así que no te estreses y comienza a practicar desde tu casa.