El IEPC y el engaño del espacio en blanco en las boletas electorales

Fernando Miranda Servín.

Gracias a la campaña que emprendió la profesora duranguense Silvia Cháirez Araiza como candidata No Registrada a la gubernatura de Durango, los ciudadanos pudimos enterarnos por manifestaciones del mismo Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del estado de Durango que el famoso espacio en blanco de las boletas electorales no es más que un vil engaño del que hemos sido víctimas durante muchos años por parte de las autoridades electorales de nuestro país.

Luego que la Profra. Silvia Cháirez Araiza invitara al electorado duranguense a escribir su nombre completo en el espacio en blanco de las boletas electorales para gobernador en este proceso electoral que se llevará a cabo este 5 de junio, los focos rojos de alerta se encendieron en el corrupto Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del estado de Durango, cuyos consejeros, ni tardos ni perezosos, se dieron a la tarea de escribir artículos y emitir comunicados a través de las redes sociales para “explicar” y desalentar al electorado para que no use el espacio en blanco de las boletas electorales, en una clara alusión a la candidatura No Registrada de la Profra. Silvia Cháirez Araiza.

El argumento de marras propagado por este instituto es que la Constitución Política y la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales “advierten que el deber de que en las boletas electorales y en las actas de escrutinio y cómputo se establezca un recuadro para candidatos o fórmulas no registradas tiene como objetivos calcular la votación válida emitida o la votación nacional emitida, efectuar diversas estadísticas para la autoridad electoral, dar certeza de los votos que no deben asignarse a las candidaturas postuladas por los partidos políticos ni a las de carácter independiente, así como servir de espacio para la libre manifestación de ideas del electorado. Por tanto, se considera que la ciudadanía no tiene un derecho a ser inscrita como candidatura no registrada en la boleta electoral, ni que los votos emitidos en esa opción se contabilicen a su favor (sic)”. También, el IEPC manifiesta que “lo conducente para este Órgano Superior de Dirección, es determinar que los votos que se llegaran a emitir en el recuadro denominado ‘Espacio para candidatos o fórmulas no registradas’, no serán distinguidos ni contabilizados a favor de persona alguna, y serán agrupados de manera conjunta en una sola unidad”, para los efectos descritos líneas arriba.

En pocas palabras, el espacio en blanco de las boletas electorales es una tomadura de pelo de las autoridades electorales, pues los votos que en este espacio se emiten a favor de tal o cual ciudadano se contabilizan en una sola unidad y NO TIENEN VALIDEZ.

Lo anterior no deja de ser una trampa que las autoridades electorales le ponen a la ciudadanía al incluir en las boletas electorales el espacio en blanco invitando al electorado a escribir dentro de él el nombre de alguna persona o fórmula no registrada. Pero en esta ocasión en que una ciudadana emprendió una fuerte campaña en las calles y en las redes sociales de Durango para proponerle al electorado su candidatura No Registrada a la gubernatura de esta entidad y tuvo una fuerte aceptación, los dueños del gran negocio de la democracia (léase partidos políticos) saltaron de sus apoltronados asientos para ordenarle a su fiel lacayo (léase IEPC) que pusiera manos a la obra para desalentar por todos los medios tanto a la ciudadanía como a la candidata No Registrada para que desistan de la “anárquica” idea de utilizar de manera copiosa el espacio en blanco de las boletas electorales.

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El consejero presidente del IEPC, Lic. Roberto Herrera Hernández, ya está denunciado en la Fiscalía General del estado de Durango por el delito de Discriminación en agravio de la Profra. Silvia Cháirez Araiza.

Para esto, las autoridades del IEPC trataron con despotismo, violencia de género y discriminación a la candidata No Registrada, Profra. Silvia Cháirez Araiza, cuando esta se presentó en las instalaciones de este instituto para notificar su participación en estos comicios y solicitar las mismas garantías que se otorgan a los candidatos de los partidos políticos, como por ejemplo disponer de observadores identificados con gafetes para realizar el conteo de los votos a su favor y un documento en el que se le notifique el total de votos que reciba como candidata No Registrada. “Esto no fue del agrado del presidente del IEPC, Lic. Roberto Herrera Hernández, quien me trató con desprecio y discriminación contestándome: ‘¡¿Quiere todo eso!? ¡Para los doscientos votos que va a obtener!’”, denuncia la Profra. Silvia Cháirez Araiza.

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El oficio de marras del IEPC en el que “explica” las supuestas razones por las que no son válidos los votos a candidatos no registrados.
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El “acuerdo” de los consejeros del IEPC en el que deciden denunciar a la Profra. Silvia Cháirez Araiza por supuestamente haber presentado un documento falso ante ese instituto corrupto.

La segunda medida de carácter represivo que tomaron los consejeros de marras del IEPC fue la de emitir un “acuerdo” para denunciar a la Profra. Silvia Cháirez Araiza ante la Fiscalía General del Estado de Durango por supuestamente haber presentado un documento falsificado que notificaba la vinculación de las candidaturas no registradas al actual proceso electoral. El documento, de acuerdo a la Profra. Silvia Cháirez, “tiene tiempo circulando en las redes sociales, les llevé una copia a los funcionarios del IEPC para que me informaran si todavía estaba vigente y si no para que lo actualizaran”, pero ese fue motivo suficiente para que los consejeros del IEPC arremetieran contra la Profra. Silvia Cháirez acusándola del delito de Falsificación o Alteración y Uso Indebido de Documentos.

Otro ciudadano que está sufriendo represalias por parte de este instituto que se ha tomado facultades de juez y parte, interpretando la ley a su modo, es el joven político izquierdista Emmanuel David Reyes Ortiz, en contra de quien el IEPC inició un “Procedimiento Especial Sancionador”, dándole trámite a una “denuncia” del partido Morena por la supuesta “Promoción de campañas de candidatos no registrados”. Emmanuel David Reyes Ortiz fue “notificado” en su domicilio el pasado 2 de junio.

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El “Procedimiento Especial Sancionador” del IEPC contra Emmanuel David Reyes Ortiz “por promocionar campañas de candidatos no registrados”.

Y así, con este tipo de agresiones a los derechos humanos y a la libertad de expresión es como el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del estado de Durango se ha convertido en una especie de tribunal local de la Santa Inquisición Electoral, al servicio de los aviesos intereses de los partidos políticos que, esos sí, pueden violentar todas las leyes electorales sin que este instituto los toque ni con el pétalo de una rosa.

Esta es la mafiocracia que se vive en Durango y a estos pillos, los consejeros del IEPC, les ha tocado hacer el trabajo sucio de fontaneros a las órdenes de quienes tienen secuestrada la democracia en esta entidad norteña.