Guanajuato, la gota que debería derramar el vaso | Durango apesta a corrupción | En delegación del IMSS ya no aguantan a funcionaria acosadora

 

 

  • Guanajuato, la gota que debería derramar el vaso
  • Durango apesta a corrupción.
  • En delegación del IMSS ya no aguantan a funcionaria acosadora.

Este domingo 17 de diciembre de 2023 debe ser declarado día de luto nacional, pues en la madrugada de este día 11 jóvenes de entre 17 y 30 años fueron asesinados en la Hacienda de San José, en el municipio de Salvatierra, Guanajuato, en donde un comando armado perteneciente al crimen organizado ingresó y perpetró esta artera masacre.

Lo más seguro es que tanto el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, como el gobernador de esta entidad, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, y el alcalde, Germán Cervantes, traten de evadir sus responsabilidades y hasta criminalicen a las víctimas, como acostumbran hacer. Pero este hecho vergonzoso tiene un denominador común: la complicidad abierta de todos los niveles de gobierno de todo el país con el crimen organizado.

Fue el presidente López Obrador quien desde su llegada a la presidencia, con su ya celebérrima frase: “abrazos no balazos”, otorgó una patente de corso al crimen organizado para hacer y deshacer en todo el territorio mexicano, hundiéndonos en una espiral de violencia que ya ha rebasado todos los límites de la barbarie.

El presidente Andrés Manuel López Obrador, su política irresponsable de “abrazos no balazos” ya ha provocado muchos asesinatos de ciudadanos por parte del crimen organizado.

Y en estos hechos no ha transitado solo el sátrapa tabasqueño, pues indudablemente ha sido flanqueado por las complicidades de los gobernadores de las entidades en las que han sentado sus reales las asociaciones delictivas más peligrosas del país.

Son ellos, la clase política gobernante (de todos los partidos) los que han abandonado las funciones del Estado mexicano y han cobijado y permitido el libre actuar de las organizaciones criminales que tienen secuestrada la gobernabilidad, la seguridad, la tranquilidad y la libertad de todos los ciudadanos que habitamos este país.

Todos estos gobernantes, morenistas, priistas, panistas, emecistas, verdes y petistas no tienen justificación para no combatir eficazmente al crimen organizado, pues nosotros los contribuyentes les hemos dado todos los recursos (miles de millones de pesos del erario) para que lo hagan.

Tenemos un Ejército que tiene más de 165 mil militares, una secretaría de Marina que tiene 51 mil efectivos, una Guardia Nacional con más de 100 mil elementos en activo, y miles de policías estatales y municipales a lo largo y ancho de nuestra nación, por lo que es más que evidente el alto grado de corrupción que practican nuestros gobernantes, tanto el federal como los estatales.

Diego Sinhue, gobernador de Guanajuato, una figura decorativa y omisa que ha permitido que su pueblo se ahogue en un baño de sangre.

Lo sucedido en Salvatierra, Guanajuato, y lo que acontece en todo el país nos pone a los mexicanos en el rango más bajo de la Humanidad, en ese estatus en el que simplemente no hay nada, más que la ley del más fuerte.

Salvatierra, Guanajuato, es la gota que debería derramar el vaso y de nosotros los ciudadanos depende tomar la actitud digna de exigir al Congreso de la Unión la destitución inmediata del presidente de la República, del gobernador de esta entidad y del alcalde de este municipio o cargar con la vergüenza de seguir pagando onerosos sueldos a cientos de miles de soldados, marinos, guardias nacionales, policías estatales y municipales que no nos sirven absolutamente para nada.

Y hablando de servidores públicos que no nos sirven para nada, en Durango tenemos otro ejemplo: el gobernador bananero priista, Esteban Villegas Villarreal, un tipo que engañó al electorado y llegó al poder para saquear el erario y violar los derechos humanos de ciudadanos vulnerables, como la señora Ivone Reyes y su hijo (ambos autistas).

A poco más de un año de haber tomado posesión como mandatario de Durango, el priista Esteban Villegas ha perdido su legitimidad por los marcados actos de corrupción y violaciones de derechos humanos que se cometen en su gobierno.

La señora Ivone Reyes es representante de la Escuela Primaria Núm. 13, ubicada en el centro de la ciudad de Durango, plantel que fue cerrado de manera arbitraria e ilegal por el expresidiario secretario de Educación de esta entidad norteña, Guillermo Adame.

Ahora Ivone Reyes, luego de interponer su queja en la Comisión Estatal de Derechos Humanos, a cargo de la Lic. Karla Obregón, ha recibido la pusilánime respuesta de que su queja no procedió porque “no pudo acreditar” que el expresidiario titular de Educación duranguense, Guillermo Adame, violó los derechos humanos de su hijo autista al cerrar ilegalmente el plantel educativo en el que estudiaba.

Alejandra Terrones, directora del Instituto Estatal de las Mujeres, fuertes cantidades del erario para beneficiar a “empresas” de dudosa procedencia, ligadas a panistas de Puebla y Tlaxcala.

El trasfondo de esto es la corrupción, pues el gobernador de marras y su gabinete delictivo cerrarán varias escuelas del centro de la ciudad de Durango para vender al mejor postor los valiosos inmuebles.

Y es que con el mandatario priista, Esteban Villegas, se respira una fétida corrupción en todos los rincones de su gobierno, como en el Instituto Estatal de las Mujeres, a cargo de Alejandra Terrones, en donde ya ha comenzado a emerger información sobre el modus operandi para saquear el erario a través de empresas fantasmas y pseudoempresas con marcados tintes religiosos; en este entramado operan personajes ligados no solo al panismo duranguense, sino también de otras entidades federativas como Puebla y Tlaxcala.

Del prianismo corrupto duranguense pasamos al gobierno federal morenista, en donde ya no soportan a la titular de la Jefatura de Servicios Jurídicos de la delegación del IMSS en el estado de Durango, Liliana Rodallegas.

Esta servidora pública se ha especializado en ejercer un agresivo acoso laboral en los cargos que ocupa, de los cuales ha sido removida por los fuertes conflictos que ha provocado.

De acuerdo a la denuncia de los trabajadores del IMSS duranguense, Liliana Rodallegas era titular de la Jefatura de Personal, de donde fue retirada por protestas de los representantes sindicales e inclusive fue objeto de una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos, por acoso laboral.

El director del IMSS, Zoe Robledo, debe intervenir ante el insultante acoso laboral que practica la Jefa de Servicios Jurídicos de la delegación Durango, Liliana Rodallegas.

Posteriormente, esta funcionaria fue designada titular de la Jefatura de Servicios Jurídicos, en donde también está ejerciendo un intenso acoso laboral perjudicando a sus subordinados.

“La delegada, Dra. Claudia Díaz, ha tratado de destituirla, pero funcionarios del IMSS, de México, han intervenido para mantenerla en esta delegación, afectando seriamente las actividades y el rendimiento del personal a su mando”, expresan trabajadores de este instituto.

Esperemos que sea el director general del IMSS, Zoe Robledo, quien intervenga para liberar a los trabajadores del IMSS Durango de esta funcionaria que ya se ha convertido en una verdadera pesadilla.

Y hasta aquí nuestra Tarde de perros con gobernantes omisos y cómplices del crimen organizado; mandatarios estatales que comandan auténticas bandas de saqueadores y funcionarias del IMSS nocivas y calamitosas.