La Joya de la Corona ha caído
Carta abierta al gobernador de Durango, Esteban Villegas
Viene a nuestra memoria el 26 de noviembre del año 2000, un día histórico para la ciudad de Durango, un día en el que se inauguraba el Centro Estatal de Cancerología, aquel edificio que albergaría nuevas esperanzas a los enfermos de cáncer; un edificio que durante un poco más de 20 años fue la Joya de la Corona. Un centro que a lo largo de su óptimo funcionamiento ha salvado la vida de miles de pacientes, tanto de nuestro estado como de los estados vecinos.
Desafortunadamente, en la actualidad su atención deja mucho que desear y no por la atención del personal hacia los pacientes sino por la carencia de equipos, insumos y medicamentos. Hoy en día es deprimente ver en lo que se ha convertido este Centro que tristemente dejó de ser un referente a nivel nacional.
Un hospital de tercer nivel que habita en su interior un mastógrafo, el cual no funciona desde hace poco más de 4 meses dejando sin atención a las pacientes, mismas que tienen que buscar donde poder ser atendidas, algunas veces gastando dinero que no tienen para realizarse este estudio.
Un hospital de tercer nivel que retrasó decenas de administraciones de quimioterapias a finales del año pasado por motivo de la escasez de medicamentos no surtidos por la empresa SAFE a consecuencia de un retraso en el pago a dicha compañía; y lo más insólito es que el Centro cuenta con Campanas que permiten la preparación de los medicamentos, sin embargo se optó por seguir subrogando el servicio.
Un hospital de tercer nivel que increíblemente suspende cirugías por falta de anestésicos.
Un hospital que LUCHA CONTRA EL CÁNCER y que cuenta con un área de Radioterapia no puede estar sin prestar este servicio, sin embargo la Tomoterapia dejó de funcionar a finales del mes de diciembre de 2024, dejando sin atención a más de 100 pacientes que invariablemente tendrán progresión de su enfermedad e incluso LA MUERTE.
Y qué decir del laboratorio de análisis clínicos, que con tanto esfuerzo en la administración pasada se gestionó y logró montarse para la atención de niños y adultos oncológicos, todo esto para que hace algunos días se desmantelara argumentando la falta de reactivos, dejando sin servicio a los pacientes.
No conforme con esto, todos los consultorios se quedaron sin impresoras. ¿Por qué? Simplemente porque eran impresoras prestadas, es decir, a comodato y al no recibir el pago de insumos se dispuso hacer el retiro de los equipos.
Un edificio de 3 plantas resulta ser pequeño, pero no para contar con 4 personas de intendencia que tienen que hacer una labor titánica para mantener limpio el edificio y evitar la aparición de algún agente patógeno, que para los pacientes inmunodeprimidos (como lo son los oncológicos) es un gran riesgo para su salud.
Un sistema de seguridad mermado, solo con dos guardias de seguridad que hacen a medias su trabajo por el cansancio acumulado de trabajar 24 horas seguidas porque no hay para pagar más personal.
Este centro, con tantas carencias por subsanar, es un centro para el que “NO HAY DINERO”, pero sí hay dinero para subrogar una empresa de servicio de cocina en cada hospital público de la ciudad; sí hay dinero para remodelar el área de oficinas del CECAN; sí hay dinero para comprar un terreno en la frontera; sí hay 100 millones para la carretera Durango–Nombre de Dios y tantas cosas más. Esto es difícil de creer pero increíblemente cierto.
Pero lo realmente preocupante es que toda esta problemática es el reflejo de desvíos, pésima distribución y mala administración de recursos.
Y la pregunta es: ¿Quién fiscaliza y audita los recursos del centro y del patronato? Una pregunta a la que nadie da respuesta.
Señor Gobernador, Dr. Esteban Alejandro Villegas Villarreal, usted dijo en campaña que la SALUD iba a ser prioridad en su gobierno, pero queremos decirle que la salud de los pacientes con cáncer y la salud en general de los duranguenses no es un BOTÍN POLITICO como usted lo asegura.
Todos son seres humanos como usted, como sus padres, sus hermanos, su esposa e hijos; para todos y cada uno de ellos el tener acceso a la salud es un Derecho.
Doctor Villegas, todos están muriendo esperando atención y tratamiento.
A usted, señor gobernador, la ciudadanía le entregó la joya más importante de Durango y a usted, señor gobernador, LA JOYA DE LA CORONA SE LE HA CAÍDO.
Atte.
Trabajadores del Centro Estatal de Cancerología.