
El NarcoCongreso de Durango y su diputado impúdico | Anabel, el chivo expiatorio | #FueClaudia, la responsable directa del asesinato de Carlos Manzo

- El NarcoCongreso de Durango y su diputado impúdico.
 - Anabel, el chivo expiatorio.
 - #FueClaudia, la responsable directa del asesinato de Carlos Manzo.
 
Desde el inicio del sexenio del narcogobernador “claudista” Esteban Villegas, los diputados del NarcoCongreso de Durango han asumido un papel contrario a los intereses de la ciudadanía, tanto protegiendo los actos de corrupción, ineptitudes y saqueos del narcomandatario sanjuanero como aprobándole dócilmente sus solicitudes de créditos bancarios, que a mitad de esta administración ya superan los 15 mil millones de pesos de endeudamiento.
Hoy, con un gobierno estatal que hace aguas por todos lados, con una crisis económica y laboral sin precedentes, pues el narco”médico” ha sido incapaz e incompetente para atraer inversiones y generar empleos; con una administración pública plagada de actos de corrupción; con terrible inseguridad y crisis humanitaria por las casi 500 desapariciones que ha habido en lo que va del sexenio, vemos que el papel que han desempeñado los 25 diputados duranguenses ha sido más en beneficio propio que en beneficio de la ciudadanía.
En Durango para nadie son secretas las fuertes dádivas que todos los legisladores locales reciben mensualmente por parte del gobierno estatal, precisamente para ser comparsas y callar dócilmente ante todo tipo de atropellos que cometa contra la ciudadanía el inquilino del Centro de Convenciones Bicentenario (CCB).

Y la sumisión es tan abyecta que desde el inicio de esta LXX Legislatura estos diputados, todos, han aceptado la injerencia directa de los poderes fácticos tanto en el presupuesto como en la nómina del NarcoCongreso duranguense.
Uno de los diputados, el más impúdico, que se ha despachado con la cuchara grande de la corrupción y el tráfico de influencias es el priista Ernesto Alanís Herrera, personaje muy cercano al narcogobernador Esteban Villegas, quien desde el pasado mes de septiembre ocupa la presidencia de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del NarcoCongreso de Durango. Este legislador es esposo de la exsecretaria de Contraloría, la C.P. Tania Julieta Hernández Maldonado, quien como tal protegió los saqueos brutales del exgobernador panista José Rosas Aispuro y encubrió también los robos al erario que han perpetrado los colaboradores cercanos del narcogobernador Villegas, en especial las millonarias sustracciones ilegales para beneficiar a su papá que ha hecho el director de Comunicación Social, Víctor Hugo Hernández Fuentes, ignorando inclusive el oficio CPC/VPM/029/2025, emitido por la presidenta del Comité de Participación Ciudadana, del Comité Coordinador y del propio Sistema Nacional Anticorrupción, Lic. Vania Pérez Morales, mediante el cual la reconvino para cumplir con su deber y aplicar la ley al servidor público transgresor, Víctor Hugo Hernández Fuentes, cosa que a Tania Julieta Hernández Maldonado le importó menos que la mitad de un cacahuate.

Así las cosas, luego de renunciar a la titularidad de la secretaría de Contraloría el pasado 13 de agosto, esta contadora pública inescrupulosa (esposa del presidente de la JUGOCOPO del NarcoCongreso duranguense, Ernesto Alanís Herrera) a los cinco días ocupó el cargo de Presidenta del Órgano de Administración Judicial del Poder Judicial del estado de Durango; sí, el órgano de administración que maneja todo el presupuesto del Poder Judicial duranguense. ¿Qué confianza puede tener la ciudadanía de que el presupuesto del Poder Judicial de Durango está siendo manejado con total transparencia y pulcritud?

Cabe mencionar también que en este Poder Judicial recientemente ingresó a trabajar como magistrada del Tribunal Superior de Justicia la hermana del diputado Ernesto Alanis Herrera, María Magdalena Alanís Herrera, elegida “democráticamente” por el “voto popular” el pasado 1 de junio. Si recordamos, los nuevos jueces y magistrados del Poder Judicial de Durango, por obra y gracia del narcogobernador Esteban Villegas no tuvieron contrincantes en dichas elecciones, por lo que un solo voto a favor era suficiente para que “ganaran” la elección y obtuvieran sus cargos. Esta es la impudicia del diputado priista Ernesto Alanís Herrera, quien junto con su esposa y hermana ocupan, no por casualidad o reconocidos méritos, tres de los cargos más relevantes dentro de los poderes Legislativo y Judicial de Durango.
Este viernes 31 de octubre la fiscal torturadora Sonia Yadira de la Garza vinculó a proceso a la trabajadora de limpieza del Hospital Materno Infantil, Anabel Reza Meza, imputada como presunta cómplice de Karla Daniela “N”, la joven que robó a la bebé Judith Alejandra de este nosocomio el pasado jueves 23 de octubre. Este hecho aumentó la indignación de la ciudadanía duranguense, que se ha enterado por los testimonios de Perla Muñoz, hija de Anabel, de las graves violaciones a sus derechos humanos de las que fue objeto, desde golpizas hasta torturas psicológicas por parte de supuestos elementos de la Fiscalía General de Durango que actuaron bajo las órdenes de la Fiscal Sonia Yadira de la Garza.

Ahora, todo el aparato estatal, junto con sus medios oficialistas se ha estado enfocando en desacreditar a los integrantes de la familia de Anabel Reza, desde propagar que intentaron quemar el Hospital Materno Infantil hasta ordenar a las enfermeras de esta institución que otorguen entrevistas a algunos medios afines para quejarse de maltratos de la ciudadanía desde que ocurrieron estos hechos.
Lo cierto es que el gobierno corrupto del narco”cantante” priista Esteban Villegas decidió hacer de Anabel Reza su chivo expiatorio para curarse en salud y desviar la atención pública sobre lo que realmente sucedió el jueves 23 de octubre; es decir, el hecho de que quedaron en evidencia la ineptitud y negligencia absoluta del director del Hospital Materno Infantil, Javier Fernando Loera Ramírez, y la responsabilidad directa de los “empresarios” Víctor Falcón Rentería y Rosa Yareli Luna González, quienes ostentan el millonario contrato para otorgar “seguridad” a los hospitales del gobierno de Durango. Para el narcogobernador Esteban Villegas fue más fácil y “práctico” cargarle todas las culpas a la modesta trabajadora de limpieza, Anabel Reza, que sancionar a su amigo íntimo, el Dr. Javier Fernando Loera Ramírez, y rescindir el contrato de sus “empresarios” favoritos, Víctor Falcón Rentería y Rosa Yareli Luna González, quienes de acuerdo a testimonios de trabajadores de la secretaría de Finanzas “son prestanombres, el verdadero oficio de Víctor Falcón Rentería es el de cargador en el mercado de la Central de Abastos El Refugio, en la ciudad de Durango”. Y la pregunta obligada es la siguiente: ¿Quién o quiénes están detrás de Víctor Falcón Rentería y Rosa Yareli Luna González?

Dentro de tres meses será la primera audiencia del juicio de Anabel Reza, en la que sus abogados tendrán oportunidad de presentar pruebas a su favor que la ayuden a obtener su libertad. En este tiempo, seguramente veremos manifestaciones y marchas de apoyo de la ciudadanía exigiendo justicia y libertad para Anabel. Mientras tanto, el nombre de Anabel Reza se suma a la larga lista de ciudadanos que han sido encarcelados por la fiscal Sonia Yadira de la Garza a través de la fabricación de delitos, violaciones al debido proceso, violaciones graves a sus derechos humanos y torturas.

En cuanto al Hospital Materno Infantil, el narco”doctor” Villegas tendrá que hacer una depuración a fondo si no quiere tener problemas aún más graves que el del caso de la bebé Judith Alejandra, empezando por la destitución de su amigo, el director de este nosocomio, el Dr. Javier Fernando Loera Ramírez, y algunos directivos que ostentan títulos de dudosa procedencia y son señalados por los mismos trabajadores de este hospital: “Las autoridades de esta secretaría de Salud deben investigar a trabajadores y trabajadoras que ocupan puestos de dirección y jefaturas ostentando títulos apócrifos, como por ejemplo la supuesta enfermera Mayela Ortiz Zamora, quien no aparece en la página oficial del Registro Nacional de Profesionistas; como ella hay muchos en el Hospital Materno Infantil y en los demás hospitales del sector salud del gobierno de Durango”.
Y el sábado 1 de noviembre hubo conmoción nacional por el asesinato del carismático alcalde de Uruapan, Michoacán, Carlos Alberto Manzo Rodríguez, quien recibió varios impactos de bala que le quitaron la vida durante la celebración del Día de Muertos en la plaza central de este municipio.
Este cobarde homicidio que ha consternado a toda la ciudadanía tiene nombre y apellido pues desde hace varios meses el alcalde Carlos Manzo solicitó apoyo públicamente a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, para que interviniera en Uruapan con las fuerzas federales para combatir al crimen organizado que tiene asolada a esta región; sin embargo, el apoyo federal fue nulo, ya que a principios del mes pasado le enviaron 200 elementos de la Guardia Nacional, mismos que extrañamente fueron retirados hace dos semanas dejándolo en total estado de indefensión.

“¡#FueClaudia!, es una de las exclamaciones que más circulan en las redes sociales, emitidas por una ciudadanía indignada y dolida ante este artero crimen contra uno de los pocos, poquísimos políticos honestos que teníamos.
Carlos Manzo figuraba ya como fuerte aspirante a la gubernatura de Michoacán, no solo por sus acciones en contra de la delincuencia organizada dentro del municipio que gobernó hasta ayer, sino también por su amplia preparación política y académica.
“¡#FueClaudia!, es el grito que debe estar resonando en los oídos de la mandataria morenista, pues efectivamente fue Claudia Sheinbaum quien le negó el apoyo que muchas veces Carlos Manzo le pidió para someter a los carteles criminales que asesinan y extorsionan al pueblo de Uruapan. Y Carlos Manzo fue más allá denunciando los supuestos nexos del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla con grupos del crimen organizado.
Antier mataron a Carlos Manzo, uno de los imprescindibles, y ayer la presidenta Claudia Sheinbaum amaneció con un problema gigantesco pues no solo su gobierno está en tela de juicio en los medios nacionales e internacionales, sino que ahora está obligada a someter de una vez por todas a todos los carteles y grupos narcoterroristas que azotan nuestro país, a reserva de que siga siendo señalada como cómplice de estos.

El asesinato ruin de Carlos Manzo ha puesto a la presidenta Claudia Sheinbaum en la encrucijada de seguir con su “combate” medido, calculado y selectivo contra algunas facciones del crimen organizado o romper el pacto transexenal que le heredó el mafioso expresidente Andrés Manuel Lopez Obrador y ponerse de lado del pueblo de México, sometiendo sí o sí al cien por ciento de los grupos criminales que tenga registrados el Centro Nacional de Inteligencia, perteneciente a la secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, a cargo de Omar García Harfuch. De no escoger esta última opción, Claudia Sheinbaum se estará colocando en la no grata posición de ser exigida su renuncia, no por los representantes de los partidos de “oposición”, que también han sido parte de este problema, sino por el pueblo de Mexico.
Y hasta aquí nuestra Tarde de perros con diputados inescrupulosos y abyectos; narcogobernadores protectores de amigos ineptos y de “empresarios” privilegiados, y presidentas de la República detestablemente omisas.
