La triste historia de la UPD
Fernando Miranda Servín.
Mucha efervescencia se está dando en estos momentos en la Universidad Pedagógica de Durango con el inminente nombramiento del nuevo director, ya bajo el gobierno del cambio encabezado por el Dr. José Rosas Aispuro Torres.
Dentro de este contexto, un buen número de académicos y estudiantes se están manifestando en las redes sociales y en diversos medios de comunicación para externar sus puntos de vista. Así, un grupo de integrantes de esta comunidad universitaria se acercó a nuestra redacción para realizar una serie de denuncias que es preciso que la ciudadanía duranguense conozca, y en entrevista exclusiva para raza cero se manifestaron respecto a la actuación de quien hasta hace poco fue director de esta institución educativa y hoy pretende reelegirse en dicho cargo:
“El Dr. José Germán Lozano Reyes, ocupó el cargo de director de la Universidad Pedagógica de Durango de 2012 a 2016. Al inicio de su administración, el Dr. José Germán Lozano Reyes recibe el personal de base y 10 personas de contrato, y ahora, al final de su gestión, deja 30 trabajadores de contrato, entre los cuales está su cuñado, su compadre y su sobrina; a su vez, el Dr. Lozano Reyes le ha dado plazas a varios hijos de académicos que son sus incondicionales, plazas a las que no tienen derecho puesto que las plazas académicas se concursan y dictaminan, situación que no ha sucedido en estos casos”, denuncian los académicos y estudiantes de esta institución que solicitan el anonimato por temor a sufrir represalias.
En cuanto a la Comisión Académica Dictaminadora de la UPD, los denunciantes señalan: “Esta Comisión está constituida por académicos de varias instituciones locales, pero su desempeño es totalmente opaco pues en este momento está manchada por la demanda de un participante inconforme que concursó para obtener una plaza y no se la dieron”.
El demandante es el señor Manuel Salas, especialista en Literatura, quien hace aproximadamente un año concursó para ocupar una plaza en esta universidad y fue rechazado. “Esa plaza se la dieron a un allegado del Dr. José Germán Lozano Reyes”, exponen los académicos.
Actualmente, esta Comisión Académica Dictaminadora de la UPD trabaja con solo tres de sus cinco integrantes ya que dos de ellos se retiraron inconformes por la manera de proceder de los demás integrantes. “Uno de los integrantes de esta Comisión es el Profr. Fernando Ramírez, de la UJED, y su hija, Cintya Ramírez Escárpita, fue beneficiada por el Dr. Lozano Reyes con una plaza de docente”, revelan los inconformes.
En lo académico, la UPD, bajo la dirección del Dr. José Germán Lozano Reyes, ha quedado por los suelos “no hay acreditación ni evaluación de programas educativos, ni de planeación académica, tampoco hay gestiones de recursos ni transparencia de gastos; la UPD ofrece diplomados, especialidades, maestrías y doctorados pero debido a estas inconsistencias académicas muchos alumnos optan por estudiar y formarse en otras instituciones de renombre en el estado”, apuntan.
El período del Dr. José Germán Lozano Reyes terminó el pasado 20 de noviembre de 2016, y la convocatoria para elegir al nuevo director se emitió el 19 de diciembre de 2016, terminando el plazo el pasado 10 de febrero de este año 2017. “Y la sorpresa que nos encontramos es que en la terna de aspirantes aparece el Dr. José Germán Lozano Reyes con intenciones de reelegirse”, informan los denunciantes.
Así, con su séquito de académicos incondicionales y un Consejo Estudiantil que tiene totalmente sometido a la vieja usanza priísta, y que supuestamente representa a los 1,800 alumnos que están matriculados en la UPD, el Dr. José Germán Lozano Reyes pretende reelegirse para continuar siendo director de esta institución educativa por 4 años más, y para tal efecto ha estado presionando al gobernador José Rosas Aispuro Torres a través de desplegados dirigidos a este y que circulan en las redes sociales de internet, los cuales únicamente son firmados por “Académicos de la UPD”; en ellos, los “académicos de la UPD” exaltan los falsos logros del Dr. Lozano Reyes y, de manera agresiva, presionan al primer mandatario estatal para que ratifique su nombramiento por 4 años más.
Por supuesto, sería lamentable que el gobernador Aispuro Torres cediera a este tipo de presiones de mal gusto y más cuando los trabajadores de la UPD refieren: “Durante la campaña electoral del año pasado el Dr. Lozano Reyes puso a disposición del PRI todo el parque vehicular de la UPD e hizo proselitismo abierto a favor del candidato priísta Esteban Villegas Villarreal”.
El Dr. José Germán Lozano Reyes tiene plaza de profesor en el Centro de Actualización del Magisterio. “En el 2015 falleció la Profra. Martha Moreno, que daba clases en la UPD, y el Dr. Lozano Reyes arregló de inmediato para quedarse con esa plaza y con su clave”, exponen los trabajadores indignados.
Por lo pronto, el Dr. Lozano Reyes, quien quiere que el gobernador Aispuro Torres lo ratifique como director de la UPD, desde el pasado 20 de febrero no se ha presentado a dar clases, por lo que algunos alumnos bromean: “Ya aparecerá para cantarle su canción: ‘No estaba muerto, andaba de parranda’”.