Alcaldesa Juana Leticia Herrera Ale demanda al periodista Juan Monrreal por “daño moral”
De la redacción de razacero.
Gómez Palacio, Durango.- Por considerar que las denuncias del periodista lagunense Juan Monrreal López le han ocasionado “una afectación consistente en el grado patológico psíquico y depresivo, aunado a trastornos psicológicos, estrés y depresión (sic)”, la alcaldesa de Gómez Palacio, Juana Leticia Herrera Ale, ha demandado al conocido comunicador por “daño moral”.
En entrevista exclusiva para razacero, Juan Monrreal detalla:
“El pasado 21 de marzo, como a las 8 y media de la mañana, se presentaron a mi domicilio dos sujetos sin identificación. Yo no me encontraba en ese momento pues por motivos de trabajo viajaba a la capital estatal. Los tipos le exigieron a mi esposa que me avisara que querían hablar conmigo. Ella les dijo que me encontraba fuera de la ciudad y, al no querer mostrar sus identificaciones, les pidió que se retiraran de mi domicilio.
“Una hora después apareció la notificadora María Teresa de Jesús Delgado Gallegos -quien se ostentó como licenciada-, escoltada por los que dijo eran un par de supuestos abogados, pidiéndole a mi esposa que me llamara para entregarme ‘personalmente’ la notificación del Juzgado Primero de Primera Instancia del Ramo Civil del Tercer Distrito Judicial en el Estado de Durango (sic); también, de manera prepotente, esta funcionaria le exigió a mi esposa que abriera el portón, orden que por supuesto no fue obedecida por lo que molesta le dijo que me avisara que al día siguiente, 22 de marzo, tendría que estar en mi domicilio para recibir la notificación de dicho litigio civil interpuesto por la presidente Juana Leticia Herrera Ale, por ‘daño moral’”, relata Juan Monrreal.
En la demanda que tendrá que resolver el juez de la Primera Instancia del Ramo Civil, Gerardo Ramírez Juárez, la alcaldesa manifiesta que el periodista Juan Monrreal “y la revista virtual (digital) DEMÓCRATA NORTE DE MÉXICO” (sic) la han denostado y lo han hecho configurando la real malicia (sic), por lo que le pide a la autoridad judicial que Juan Monrreal le “resarza con el pago de la cantidad en dinero que resulte por concepto de indemnización”. Al respecto, Juan Monrreal manifiesta:
“La alcaldesa Juana Leticia Herrera Ale da por hecho que ganará la demanda antes de que inicie el juicio porque según ella padece ‘una afectación consistente en el grado patológico psíquico y depresivo’, trastorno que le impediría permanecer al frente de la presidencia municipal al presentar un perfil de enfermedad mental que le imposibilitaría conducir la vida pública de este ayuntamiento de 370 mil habitantes, esto de acuerdo con la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la Constitución Política del estado de Durango y la Ley Orgánica del Municipio Libre, por sólo citar algunas leyes, y ofrece presentar incluso la valoración del psiquiatra Fernando Sánchez Nájera, ante la sala judicial”.
Juan Monrreal López, amplio conocedor de la problemática política de La Laguna, detalla la manera de “gobernar” de la alcaldesa gomezpalatina:
“Juana Leticia Herrera Ale se ha aferrado a construir una presidencia de corte delincuencial que genere terror a base de amenazas para evitar cualquier tipo de cuestionamiento sobre los desvíos millonarios que existen en el municipio, al grado de emprender persecuciones contra los que considera sus rivales, como por ejemplo declarar ‘enemiga pública número uno del municipio’ a la ex diputada federal Rocío Rebollo Mendoza, ex alcaldesa y hoy candidata a senadora por el PRI; otro ejemplo fue el de haber ordenado al Cabildo en pleno denunciarme en la vice Fiscalía exigiéndome revelar mis fuentes de información, a mediados del año pasado.
“La ex primera regidora, María Isabel Charles, también fue víctima de represalias graves por parte de esta alcaldesa cuando la corrió del cuerpo edilicio después de retenerla en las oficinas de la alcaldía contra su voluntad, entre otros casos”, refiere Juan Monrreal.
Ahora la alcaldesa gomezpalatina, engolosinada por la impunidad total que disfruta debido a la protección a ultranza que le han dado tanto el Congreso del estado de Durango como el gobierno estatal de corte panista-perredista, arremete contra el periodista Juan Monrreal, director de la revista Demócrata Norte de México, demandándolo por “daño moral”, cuando en los hechos Monrreal López ha sido el único comunicador lagunense que ha denunciado con lujo de detalles las promesas incumplidas de esta alcaldesa y sus transgresiones a las leyes de la Administración Pública, como por ejemplo ser la presidente municipal más faltista en la historia de Gómez Palacio, hecho por el cual ya tendría que haber sido destituida por el Congreso duranguense; sus desvíos de recursos públicos federales y estatales; sus ataques y violaciones a las libertades de expresión y manifestación, y persecuciones a ciudadanos, sean priístas, panistas o de cualquier filiación política, descalificándolos ante la opinión pública utilizando el erario para pagar a medios y reporteros serviles.
“Es el jefe de Comunicación Social del municipio de Gómez Palacio, Fernando Alatorre Escobedo, quien se encarga de orquestar este tipo de ataques dilapidando el erario gomezpalatino, éste funcionario se ostenta como licenciado, pero es obvio que carece de preparación académica, además de no aparecer en el Registro Nacional de Profesionistas”, apunta el periodista Juan Monrreal López.
En su larga lista de artículos y reportajes, en los que revela puntualmente los abusos de poder de esta alcaldesa, destaca la reseña de la represión que ejerció sobre los habitantes del poblado Dinamita el pasado 9 de marzo:
“Ese día, Juana Leticia Herrera, procaz y feroz, ordenó reprimir con gases, toletes y ráfagas de metralleta a los habitantes de Dinamita que se oponen a la instalación de la fábrica de cianuro de sodio, propiedad de la empresa estadounidense Chemours”, señala Juan Monrreal.
En este contexto que cada día se torna más inaceptable, la represión y persecución contra el periodista Juan Monrreal por parte de la alcaldesa gomezpalatina va en aumento sin que el Congreso del estado de Durango ni el titular del ejecutivo estatal, José Rosas Aispuro Torres, intervengan aun cuando la Comisión Nacional de los Derechos Humanos envió a mediados del año pasado una petición al gobierno estatal para que salvaguardara la integridad física y patrimonial de Juan Monrreal luego de haber sido amenazado con encarcelamiento por la mayoría de los regidores del municipio de Gómez Palacio, quienes bajo las órdenes de la alcaldesa Juana Leticia Herrera Ale el 31 de mayo de 2017 lo “denunciaron” en la Vicefiscalía del estado con el siguiente argumento absurdo: “Aquí estamos los regidores, dando la cara a él (sic) a través de toda la prensa, para que se presente ante el Ministerio Público y diga quién o quiénes son los que están dándole información y así, a todos los demás los deje libres de toda culpa”, intentando obligar al periodista Juan Monrreal para que revelara el nombre del o los regidores que le proporcionaban información sobre las corruptelas que se cometen en este municipio.
Hoy, en un intento desesperado por reprimir el trabajo periodístico de este comunicador, la alcaldesa Juana Leticia Herrera Ale, en su demanda por “daño moral”, se dice estar afectada “en el grado patológico psíquico y depresivo”, y dice sufrir “trastornos psicológicos, estrés y depresión” debido a las denuncias de sus actos de corrupción y omisiones que el periodista Juan Monrreal ha publicado en su medio informativo Demócrata Norte de México, por lo que Monrreal López remata al final de la entrevista concedida a razacero:
“En la historia de este ayuntamiento, los únicos alcaldes que han amenazado, perseguido, golpeado con toletes y bates de béisbol, y reprimido con todas las policías e incluso con el ejército, gaseado con lacrimógenos y baleado al pueblo gómezpalatino son Carlos Herrera Araluce y Juana Leticia Herrera Ale, evidentemente padre e hija”.