Los porros de la FEUD y la “democracia” a la fuerza

Fernando Miranda Servín.

La mañana del 18 de octubre pasado los jóvenes estudiantes del Colegio de Ciencias y Humanidades de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), se encontraron con la sorpresa de que no podían salir de su escuela pues las puertas estaban cerradas con cadenas y custodiadas por sujetos mal encarados. Ese día se llevaron a cabo comicios estudiantiles para elegir a la presidencia de la Sociedad de Alumnos de este plantel, y la exigencia que les imponían los tipos torvos treintañeros para poder salir de su propio colegio era votar por la planilla estudiantil llamada “Fuerza CCH”, representada por Mario Ortiz, única planilla registrada y ligada a la Federación de Estudiantes Universitarios de Durango (FEUD), dirigida por Ricardo Fabián García Arrieta, pues su hermano, el presidente de la Comisión Electoral estudiantil, Fausto Alonso García Arrieta, días antes le negó el registro a la planilla “Go CCH”, encabezada por el estudiante Isaid Torres Quiroz.

El tener una sola opción para votar causó molestia entre los alumnos del CCH, por lo que la mayoría decidió no acudir a las urnas instaladas en el interior del colegio.

Cientos de alumnos del CCH-UJED fueron privados de su libertad de manera ilegal por porros de la FEUD y personal de este colegio.

Así las cosas, la planilla “Fuerza CCH” de acuerdo a los reglamentos de la FEUD debía obtener mil votos como mínimo para poder registrar su triunfo, razón por la que los porros de la FEUD, comandados por su dirigente, Ricardo Fabián García Arrieta, y su hermano Fausto Alonso, entraron en acción cerrando las puertas del plantel para obligar a los alumnos a votar, o de lo contrario no los dejarían salir.

Empleados del CCH y porros cuarentones cerraron las puertas del plantel obligando a los alumnos a votar por la planilla “Fuerza CCH”, única registrada.
Cuando los alumnos decidieron salir del CCH de manera multitudinaria, fueron agredidos por golpeadores a las órdenes del dirigente de la FEUD, Fabián García Arrieta, y de su hermano, el presidente de la Comisión Electoral, Fausto Alonso García Arrieta.

Si ya de por si ésta acción es grave pues se trata de la comisión de un delito: privación ilegal de la libertad, más grave aún es el hecho de que los mismos directivos de este plantel se hayan prestado a que los dirigentes de la FEUD y sus porros emprendieran tal acción, e inclusive algunos de los empleados de este CCH, adscritos a la dirección, se dieron a la tarea de agredir a alumnos, por lo que muchas explicaciones tendrá que dar a los padres de familia y a la ciudadanía duranguense el director Humberto Castro Montenegro.

Después de más de dos horas de estar sometidos a las exigencias de los porros de la FEUD, los alumnos se armaron de valor y decidieron salir de manera multitudinaria del colegio, presentándose en esta acción agresiones físicas de los porros treintañeros y cuarentones en contra de los alumnos e inclusive en contra de algunas alumnas a quienes agredieron dándoles fuertes jalones de cabello, haciéndolas caer al piso.

Ante tales hechos debe haber indignación, no solo de la comunidad universitaria de la UJED, sino de la ciudadanía duranguense en general, pues es inadmisible que en este gobierno “del cambio” seamos testigos de semejantes atropellos.

Profr. Enrique Leal Maturino, candidato a la rectoría de la UJED, única voz que señala con nombres y apellidos a los responsables directos e indirectos de lo sucedido en el CCH.

Horas después de estos hechos, varias voces se manifestaron en los medios de comunicación locales para reprobar lo sucedido, pero una de estas voces fue quizá la más directa y contundente al señalar con nombres y apellidos a los responsables directos e indirectos de estos actos vergonzosos: la del profesor Enrique Leal Maturino, uno de los más notorios candidatos a la rectoría de la UJED, quien contundente manifestó: “Lo sucedido en el CCH son las consecuencias de la injerencia del alcalde de Durango, Dr. José Ramón Enríquez Herrera, y del subsecretario de Gobierno estatal, Lic. José Luis López Ibáñez, en los asuntos que solo competen a los universitarios”.

Dr. José Ramón Enríquez Herrera, alcalde de Durango, es el principal auspiciador de los dirigentes de la FEUD, dice el Profr. Leal Maturino.

Respecto al primero, el alcalde de Durango José Ramón Enríquez Herrera, señala el profesor Leal Maturino: “Es el principal auspiciador de la dirigencia de la FEUD, encabezada por Fabián García Arrieta. En este caso, el CCH es estratégico para la elección del próximo rector pues tiene la mayor matrícula de profesores, que representan votos, de ahí la intención de tomar el control absoluto de este colegio a como dé lugar”.

Lic. José Luis López Ibáñez, subsecretario de Gobierno estatal, está ofreciendo altos cargos a los candidatos a rector de la UJED a cambio de que declinen a favor de Rubén Solís Ríos, denuncia el Profr. Enrique Leal Maturino.

Respecto al subsecretario de Gobierno, Lic. José Luis López Ibáñez, Leal Maturino expone: “Este personaje está ofreciendo altos cargos a los candidatos a la rectoría, a Enrique García Carranza le ofreció el puesto de Secretario General de la UJED a cambio de declinar a favor de Rubén Solís Ríos”.

La “democracia” a fuerza de golpes y de la privación ilegal de la libertad impuesta a los alumnos del CCH por los directivos de esta escuela y por dirigentes estudiantiles que resultaron igual o más gangsteriles que los que los antecedieron, y la abierta intervención de funcionarios del gobierno estatal para inclinar la balanza a favor de un candidato a rector, sea cual fuere su perfil, son prácticas que tanto la comunidad universitaria como la ciudadanía duranguense ya padecieron durante los últimos sexenios priístas y no están dispuestas a volverlas a padecer, ahora corregidas y aumentadas bajo los gobiernos “del cambio” estatal y del municipio de Durango.

Y fueron precisamente este tipo de prácticas las que en buena parte provocaron la caída del PRI en esta entidad norteña.

El querer hacerse del poder a costa de lo que sea y pasando por encima de quien sea, ya no es una opción viable, sobre todo en Durango, en donde el pueblo se sacudió a la dictadura priísta que lo expolió más de 80 años, y en las últimas elecciones mandó a sus casas sin contemplaciones a las mediocres ofertas legislativas panistas por el pésimo desempeño que han tenido tanto el gobierno estatal como los gobiernos municipales de extracción panista-perredista, especialmente el de la capital de este estado.

Hoy, ante lo sucedido en el CCH y lo que se viene en la UJED con el ya cercano proceso para elegir al rector de la máxima casa de estudios de Durango, es imperativo recordar la frase del Benemérito de las Américas: “Nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho”. Es esto o el repudio social.