STPS extorsiona a mineros
Miguel Bermúdez Quiñones extorsiona a contratistas mineros
Hablando Derecho
Martin Alberto Hernández González.
En el año 2013, el Lic. Miguel Bermúdez Quiñones llegó a la delegación federal de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en Durango. Inmediatamente a su llegada se empezaron a presentar circunstancias que llamaron la atención y dieron margen a lo que vendría después.
El Lic. Miguel Bermúdez Quiñones llegó acompañado de un personaje de nombre Pedro Rodríguez Gómez, quien fue presentado ante la delegación como secretario particular del delegado.
Esta misma presentación la tuvo con los empresarios, a los que visitaba el funcionario antes mencionado en aparente gesto de cortesía, tendiente a establecer una relación cercana con los dueños del capital, a los cuales supervisa la STPS.
No pasó mucho tiempo cuando el secretario particular del Lic. Bermúdez, Pedro Rodríguez, empezó a solicitar dinero a las empresas, en particular a un gremio: el relacionado con la minería, y no sólo a empresas mineras como tales sino principalmente a contratistas de mineras.
Es así que el primer gran fraude en el cual participaron estas empresas se da en ese año 2013, con la impartición de un supuesto “diplomado” que llevaba por nombre “La semana de la minería”; este “diplomado”, por supuesto, tuvo un costo para los asistentes, y para garantizar la asistencia de los mismos operaron de la siguiente manera:
Primero.- Se enviaron por parte de la delegación federal del Trabajo órdenes de inspección a las mineras y sus contratistas, mismas que fueron firmadas por la Lic. Oralia Sánchez. Luego de realizadas las inspecciones, a todos los contratistas les faltó algún documento de su papelería oficial, carencia que les generaba el inicio de un procedimiento sancionador.
Segundo.- Se les invitó “cordialmente” a estas empresas contratistas a que participaran en el “diplomado” “La semana de la minería”, organizado por la STPS.
Tercero.- Para garantizar la participación de las empresas se les notificaron previamente multas y procedimientos sancionadores iniciados en contra de ellos, asegurando así su asistencia; en algunos casos, el patrocinio de dicho evento corrió a cargo de las mismas empresas, entre las que podemos nombrar a Oniva Silver y Gold Mines, con expediente número 130.C201.0029.2013; Cominvi, con expediente número 130.C201.0047.2013; MGA Contratista Minera, S.A. de C.V., con número de expediente 130.C201.0042.2013. Estas dos últimas empresas aparecieron después de la notificación de los procedimientos en su contra como patrocinadoras del evento “La semana de la minería”, en donde se suponía que entregarían diplomas, mismos que nunca fueron entregados.
Estas anomalías fueron degenerando hasta que se llegó al descaro de que Pedro Rodríguez puso una consultoría afuera de la delegación, donde supuestamente arreglaba los problemas que las empresas tenían en la STPS; en otras palabras, primero multaban a las empresas y luego ellos mismos les “ayudaban” a arreglar el asunto. Esta situación provocó que los empresarios se quejaran en las oficinas centrales de la STPS, y al venir supervisores a Durango a investigar estos hechos desaparece de inmediato la mano derecha del delegado, su secretario particular, Pedro Rodríguez Gómez.
A partir de ese momento, el delegado Miguel Bermúdez Quiñones busca quien sustituya a Pedro, y consigue a otra persona igual de corrupta, de nombre Juan Manuel Ceceñas Torrero, quien en este año reunió a todos los contratistas que laboran en la mina de Tayoltita para imponerles una tarifa mensual para supuestamente “tenerles todo en regla con la STPS”; así las cosas, quien no contrata los servicios de Juan Manuel Ceceñas Torrero es revisado por dicha delegación y, obviamente, multado.
Otro modus operandi de esta pequeña mafia oficial son las inspecciones extraordinarias a personas que nunca habían sido inspeccionadas, estas son sorpresivas; sin embargo, Juan Manuel Ceceñas Torrero va a Tayoltita y uno se pregunta ¿cómo supo que se realizarían estas inspecciones?, e incluso llega a aparecer como testigo en más de una de ellas, siendo todavía peor el hecho de que de manera inexplicable este personaje es notificado del inicio de procedimientos sancionadores a contratistas de la mina sin ser representante legal, razón por la cual no se pueden defender en su momento, y de nuevo uno se pregunta ¿con qué fin y quién le informa a Manuel Ceceñas esto?, ¿acaso quien firmó las órdenes?, ¿la Lic. Ignacia Oralia Sánchez?, ¿o bien el todo corrupto delegado Miguel Bermúdez Quiñones?
Hoy, varios de estos contratistas están siendo multados, cuando incluso algunos de ellos no llegan a tener ni 5 trabajadores, y en la mayoría de los casos no alcanzan ni 12 trabajadores. A este grado han llegado las extorsiones de estos funcionarios de la STPS, que creen que por cometer sus ilícitos con personas alejadas de la capital estas no actuarán y nosotros no nos enteraríamos.
Esta es la manera en que “trabaja” este delegado de la STPS en Durango, utilizando a sujetos como Pedro Rodríguez Gómez y Juan Manuel Ceceñas Torrero, quien tiene una averiguación previa en su contra en la Fiscalía General del Estado de Durango por hacer declaraciones falsas ante una autoridad, precisamente ante la misma Secretaría del Trabajo.
Para finalizar, es conveniente señalar que estos hechos están siendo investigados por la Procuraduría General de la República, así como por el Órgano de Control Interno de la STPS, desde 2014, por lo que se invita a los lectores que hayan sido víctimas de estos funcionarios corruptos a que acudan a estas instancias a presentar su denuncia para combatir, aunque sea un poco, la corrupción que existe dentro del gobierno, como en este caso en particular.