¿Arde París?
No, no se trata del libro de Dominique Lapierre y Larry Collins, “¿Arde París?”.
Luis Rodríguez.
Un violento enfrentamiento contra la Reforma Laboral entre estudiantes y granaderos sacudió las calles de la capital francesa el pasado 14 de junio, una manifestación desde dos ópticas enfrentadas, policías y granaderos, a un lado; los denominados MILIS, miembros del “Movimiento Independiente de Lucha Conjunta” estudiantil, al otro.
La presentación oficial de La reforma laboral el pasado 9 de marzo, exigida durante años por representantes de distintos países de la Unión Europea, ya ha originado un terremoto político y sindical. El proyecto fulmina de facto principios sagrados de la izquierda gala, como el horario laboral legal de 35 horas semanales. Y admite los despidos colectivos, con indemnizaciones rebajadas. Aunque dicha modificación no suprime la ley de horas semanales, el Gobierno da amplias posibilidades a las empresas para saltarse el límite por reestructuraciones, apertura de nuevos mercados o “causas excepcionales”.
Esto ha dado pie a la manifestación más multitudinaria desde que hace tres meses se iniciaran las movilizaciones. En plena celebración de la Eurocopa, París reunió a gente llegada de todo el país misma que se dispuso a marchar en las calles de la capital. Se asegura que 1.300.000 personas se congregaron. Por su parte, la Policía reduce dicha cifra a 80.000.