Gobierno municipal de Durango, apostándole al olvido
De la redacción de razacero.
Atrás quedaron las declaraciones firmes y contundentes que durante la campaña electoral hiciera el presidente municipal panista de Durango, Jorge Salum del Palacio, respecto a castigar los actos de corrupción cometidos por el ex alcalde emecista, José Ramón Enríquez Herrera, y su séquito de saqueadores. Hoy, a casi medio año de haber llegado al poder, la encargada del proceso de entrega-recepción por parte del gobierno de Jorge Salum, y actual síndico municipal, Luz María Garibay Avitia, continúa sin informarle a la ciudadanía duranguense los resultados obtenidos en el ejercicio de ese procedimiento.
Hasta la fecha, los ciudadanos desconocen las verdaderas condiciones financieras y materiales en las que la nueva administración, encabezada por Jorge Salum, recibió el municipio.
Como se sabe, Luz María Garibay Avitia ocupó el mismo cargo de síndico municipal durante la administración corrupta del ex alcalde José Ramón Enríquez, y durante el desempeño de sus funciones no trascendió ninguna acción relevante que haya realizado para prevenir, sancionar o exhibir públicamente muchos de los graves actos de corrupción que se cometieron en el trienio del actual senador Enríquez Herrera.
Hoy, al parecer, esta servidora pública le apuesta de nuevo al olvido de los duranguenses, al igual que otros personajes panistas que formaron parte activa del anterior gobierno municipal, y ahora, en el actual, continúan gozando de altos cargos y privilegios, como por ejemplo la joven emprendedora y propietaria de expendios, Minka Patricia Hernández Campuzano, ex regidora y actual secretaria particular del alcalde Jorge Salum; Fernando Rocha Amaro, quien convenientemente repite como regidor y presidente de la comisión de Actividades Económicas, y Claudia Hernández Espino, ex regidora y ex Secretaria del Ayuntamiento que también repite como regidora.
Estos protagonistas y otros más muy cercanos al alcalde Jorge Salum, forman parte de esa pequeña élite de panistas que ha encontrado en el municipio de Durango algo más que vocación de servicio, por lo que la ciudadanía debe estar muy atenta a las actividades que realizan.