Detenidos los tres primeros presuntos responsables del brote de meningitis en Durango

La Fiscalía sostiene que los fármacos causantes de la enfermedad fueron contaminados en cuatro hospitales privados por culpa de uno de los sospechosos

Alejandro Santos Cid.

La investigación por el brote de meningitis que ya ha matado a 35 personas en Durango ha dado un vuelco. Casi cuatro meses después del primer ingreso hospitalario, el caso se ha cobrado sus primeros detenidos. La policía ha arrestado en la madrugada de este martes a tres sospechosos, según ha anunciado el gobernador del Estado, Esteban Villegas. El personaje de mayor peso en caer ha sido Joaquín Antonio Gardeazabal Niebla, exdirector de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios del Estado de Durango (Coprised). Las autoridades han apresado también a una trabajadora de Coprised, identificada como Guadalupe N., y a un anestesiólogo, Omar N., considerado por la Fiscalía estatal como el principal responsable, ya que trabajó en los cuatro hospitales privados implicados y, según el Ministerio Público, utilizaba sus propios medicamentos, que fueron el origen del hongo que causó la infección.

Estas nuevas revelaciones arrojan luz sobre una de las principales incógnitas del caso: cómo se produjo la contaminación del hongo Fusarium solani en los cuatro lotes de bupivacaína, un anestésico local, que provocaron la meningitis. La Fiscalía señala ahora que el medicamento no estaba adulterado de origen: Pisa, la farmacéutica que lo produce, lo distribuye por todo el continente, pero solo ha habido casos en Durango. En su lugar, el Ministerio Público sostiene que fue el mal manejo en los hospitales y el hecho de que los centros médicos permitieran ingresar fármacos ajenos sin un debido control de calidad lo que causó la enfermedad.

La principal acusación, por tanto, es contra Omar N. por homicidio, lesiones y “responsabilidad profesional y técnica”. Sobre Gardeazabal Niebla y Guadalupe N. pesan los cargos de “ejercicio indebido del servicio público” y homicidio. Los tres se encuentran ya bajo prisión preventiva en el Centro Federal de Readaptación Social (Cereso) de la ciudad de Durango. Sobre el exdirector de Coprised, Villegas ha asegurado que ni siquiera contaba con el título en medicina necesario para ejercer su puesto. Hay otros siete sospechosos prófugos de la justicia, los dueños y responsables de los centros médicos donde comenzó el brote, aunque la Fiscalía cree que todavía se encuentran en territorio mexicano.

El brote de meningitis se originó en cuatro clínicas privadas de la capital del Estado, hoy clausurados: el Hospital del Parque, el Santé, el Dikcava (que funcionaba sin licencia) y el San Carlos. La fiscal de Durango, Sonia Yadira, ha asegurado en rueda de prensa: “Los hospitales no debieron haber permitido el ingreso por parte de médicos de medicamento ajeno que no hubiera sido revisado que estaba en un perfecto estado de conservación”. La responsable del Ministerio Público ha señalado que 32 de los 35 fallecimientos corresponden a mujeres operadas en el Hospital del Parque, que ha sido señalado como el principal foco de contagio, a partir del cual se propagó la enfermedad debido a Omar N.

Los otros dos arrestos no han sido jurisdicción de la Fiscalía estatal, sino de la Fiscalía Anticorrupción. En el caso de Gardeazabal Niebla, por su responsabilidad como cabeza de Coprised y el engaño en sus títulos universitarios. Guadalupe N. está señalada como la encargada de llevar un control de calidad en los hospitales implicados. De acuerdo con la institución, “omitió diversas irregularidades relevantes” como la ausencia de “farmacia hospitalaria”, “medicamento resguardado sin condiciones adecuadas”, falta de registros de temperatura y humedad o la carencia de “licencia sanitaria para manejo de medicamento controlado”, entre otros.

Ricardo Mejía Berdeja expone la ficha de los implicados en los casos de meningitis aséptica en hospitales de Durango, durante la conferencia de prensa en Palacio Nacional el 8 de diciembre 2022.
Ricardo Mejía Berdeja expone la ficha de los implicados en los casos de meningitis aséptica en hospitales de Durango, durante la conferencia de prensa en Palacio Nacional el 8 de diciembre 2022. Galo Cañas Rodríguez/ Cuartoscuro

“Quien autorizó la licencia de estos hospitales [Gardeazabal Niebla], que no tenían las características mínimas indispensables para poder funcionar, no solamente dio el permiso: no tenía título. El responsable de la Coprised en ese tiempo no tenía título y la ley marca primero que tiene que ser médico y segundo que tiene que tener título y cédula. Eso es cárcel directa por usurpación de funciones. Imagínense todo lo que firmó, eso no puede pasar”, ha sostenido Villegas, cuestionado este martes por el tema en una rueda de prensa.

El primer ingreso por un caso de meningitis fue el 14 de octubre. Desde entonces, las hipótesis sobre qué pudo suceder se han multiplicado, pero hasta ahora la investigación no había logrado esclarecer cómo llegó el hongo que provocó la enfermedad a los cuatro hospitales. “La investigación nos llevó varios meses”, ha reconocido Villegas. “En una desgracia murieron 35 mujeres, mamás jóvenes (…) Aparentemente se ve como si nos hubiéramos tardado un poco. El periodo de incubación para poder saber qué fue, de dónde fue, de dónde salió, por qué, cómo se contagió, por qué en cuatro hospitales, cuántos médicos estaban involucrados, si era el medicamento, si era otra cosa, si fue la jeringa, si fue la aguja, si fue el proceso… no es un tema tan sencillo”.

Villegas ha defendido su gestión de la crisis, a pesar de las recurrentes críticas de los familiares de las víctimas, que han organizado una manifestación en protesta el próximo viernes. Según el gobernador, en estos momentos hay tres pacientes ingresadas en el Hospital 450, una de ellas en terapia intensiva con estado grave, tres en la clínica del Seguro Social y una más en la del ISSSTE. En total, se han registrado 79 contagios, 34 mujeres fallecidas —en su inmensa mayoría madres jóvenes, debido a que el anestésico contaminado se usaba sobre todo en cesáreas— y un hombre.

(Elpais.com)