Bajo sospecha la Fiscal de Durango, por detención de médico por genocidio de meningitis
De la redacción de razacero.
“Llegaron a mi casa a la una y media de la mañana en camionetas blancas polarizadas y tapados de la cara. Mi esposo abrió la puerta y lo detuvieron estando amparado. A mi hijo de 22 años lo mantuvieron hincado. Se metieron en mi casa y catearon todo. Me preguntaron cuál era el carro de mi esposo y lo abrieron, tomaron fotografías y no vi lo que hicieron en su interior.
“A mi esposo lo acusan de llevar medicamentos a los hospitales y eso no es cierto. Los hospitales en los que trabaja mi esposo son los que le proporcionan los medicamentos que le aplica a los pacientes”, denunció Lidia Estupiñán, cónyuge del anestesiólogo Omar “N”, detenido y encarcelado ayer en el CERESO de Durango, acusado de ser quien introdujo al hospital Del Parque y aplicó el anestésico llamado Bupivacaína que provocó la muerte de 30 personas que fueron atendidas en este nosocomio particular.
Por otro lado, el Colegio Médico de Durango, en un comunicado emitido también ayer, condenó enérgicamente esta detención en la que no se está respetando el debido proceso, exigiendo a las autoridades “que no propicien un linchamiento público en contra del médico anestesiólogo Omar “N”, pues su culpabilidad no ha sido comprobada en juicio”.
Además de esto, el Colegio Médico de Durango manifestó en su comunicado: “Previamente, hemos expresado públicamente que los médicos están alejados del proceso de adquisición y manejo de los medicamentos usados en los hospitales públicos y privados, por lo que insistimos en que la búsqueda ministerial debe centrarse en lo administrativo”.
Estas declaraciones contundentes contrastan mucho con la marcada rapidez con que los medios de comunicación, afines al gobierno estatal de Durango, señalaron la culpabilidad del anestesiólogo Omar “N” como único responsable de esta tragedia que ha provocado 35 muertes y ha enlutado a esta entidad.
30 de las 35 víctimas de meningitis fueron atendidas en este hospital, en donde se dieron 60 de los 79 contagios.
“Mi esposo no solo trabaja en el hospital Del Parque (nosocomio en el que se dieron la.mayoría de casos y muertes de meningitis), trabaja en otros diez hospitales más, ¿por qué en los demás hospitales no sucedió lo mismo?”, recalcó ayer en entrevista con un medio de comunicación local Lidia Estupiñán, esposa del anestesiólogo Omar “N”.
Ahora, ante estas inconsistencias, el gremio médico duranguense está indignado pues, por lo que se puede apreciar, la Fiscal General, Sonia Yadira de la Garza, podría estar fabricando un “chivo expiatorio”, como es su costumbre, para incriminar al anestesiólogo Omar “N” y eximir de responsabilidades a los propietarios del hospital Del Parque, la familia Montes Herrera, personajes que han ocupado altos cargos en la secretaría de Salud estatal y están emparentados con algunos dirigentes de las cámaras de comercio y empresariales de Durango.
Las declaraciones de Lidia Estupiñán y el Colegio Médico de Durango han sido reveladoras y vuelven a poner en el ojo del huracán el ya mencionado huachicoleo de medicamentos que existe entre funcionarios de la secretaría de Salud del gobierno del estado de Durango y algunos directivos de hospitales privados de esta entidad.
La detención y encarcelamiento ilegal del médico anestesiólogo Omar “N”, que está amparado, aparte de ser un tropiezo judicial despierta suspicacias y sospechas sobre la actuación de la Fiscal Sonia Yadira de la Garza, muy conocida en esta entidad por sus métodos poco ortodoxos para “investigar” crímenes relevantes, por lo que nos tememos que la interrogante en esta enorme tragedia seguirá siendo:
¿Cómo, cuándo y con quién o con quiénes adquirieron el anestésico mortal los directivos de los hospitales privados en los que se generó la meningitis?