Peña Nieto, Presidencia endeble
LA PRESIDENCIA ENDEBLE…
PEÑA NIETO, LEJOS DE
LEGITIMARSE
Víctor Flores Morales, el líder del disminuido sindicato ferrocarrilero, que a mediados del siglo pasado fuera el sindicato más combativo de Latinoamérica, es otro líder sindical cuyo enriquecimiento ilícito es más que evidente, junto con Joel Ayala Almeida, de la FSTSE, y la fauna interminable de pilluelos, la mayoría identificados con el PRI, que cotidianamente se roban las cuotas de los sindicatos que conforman la CTM, de minería, Teléfonos de México, el Metro, etcétera, etcétera, etcétera.
Y aunque Enrique Peña Nieto diga que en nuestro país no hay intocables, los hechos demuestran todo lo contrario ya que la mayoría de los integrantes de su gabinete, incluido él, cuentan con antecedentes de corrupción extremos.
En este contexto, la captura de Elba Esther Gordillo debe verse como un ajuste de cuentas burdo, meramente político y mediático, que no le aporta ningún beneficio al pueblo de México toda vez que ha quedado claro que la justicia de Peña Nieto es marcadamente selectiva, y un gobernante débil como él no debe darse el lujo de exponerse a ser señalado como cómplice o encubridor de otros líderes sindicales que son igual o peor de saqueadores que la ya celebérrima profesora. Y, para complementar este cuadro, si Peña Nieto pretendió doblegar al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación encerrando a su líder vitalicia para poner en marcha sin problemas su reforma educativa, no contó con el hecho de que en el magisterio existe otra corriente sindical, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, esa sí auténticamente combativa, que también se opone a esa reforma educativa que coloca a los profesores de todo el país en riesgo de perder sus plazas para darle paso a la privatización de la educación. Y en la CNTE no existe un liderazgo vertical como en el SNTE, por lo que Peña Nieto tendría que ejercer la represión abierta e ilegal en contra de este organismo para abrirle paso a su reforma educativa, acto que políticamente terminaría por deslegitimarlo aún más.
Por otro lado, Peña Nieto emprendió su Cruzada Nacional contra el Hambre a través de la desacreditada secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles, con tan mal tino que está convirtiendo en limosneros a los más de 50 millones de mexicanos que sufren pobreza extrema al aplicar las mismas políticas populistas que el PRI ha practicado durante casi 100 años, regalando despensas e implementando el aparatoso y relumbrante Programa de Pensión para Adultos Mayores, que no es mas que una broma de mal gusto para los más de dos y medio millones de ciudadanos que superan los 65 años y que van a recibir la fabulosa cantidad de 525 pesos mensuales, o sea 17.5 pesos diarios para que satisfagan su necesidad más elemental, que es la de comer. Esto, no es más que un verdadero insulto de un PRI que regresa a la presidencia con el negro antecedente de que sus anteriores gobernantes desmantelaron y privatizaron casi en su totalidad las instituciones que conformaban el Estado mexicano, dejando en el desempleo a millones de ciudadanos.
En contraste, los aumentos a los precios de la gasolina, el gas doméstico, las tarifas de electricidad y los productos alimenticios básicos no paran, en un país en el que solamente el 1% de su población, la clase oligarca y la élite política conformada por los partidos de “izquierda” y derecha, no sufren penurias económicas.
Por todo lo anterior, los ciudadanos debemos reflexionar qué es lo que realmente queremos para nosotros y nuestros hijos, si continuar recibiendo espectáculos de cirqueros pueblerinos que nos exhiben a una líder corrupta enjaulada y merolicos que nos ofrecen 17.5 pesos diarios para comer o comenzar a reivindicarnos rechazando ya a los partidos y a sus políticos para que los ciudadanos que no tengan ningún compromiso deleznable aspiren al poder para repartir el producto de nuestras riquezas patrimoniales entre el pueblo de México y no sigan teniendo como destino los bolsillos de unos cuantos sátrapas.
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