Esteban Villegas, el peor gobernador de México | Ingobernabilidad y saqueos en Durango | Violencia y caos con López Obrador
- Esteban Villegas, el peor gobernador de México.
- Ingobernabilidad y saqueos en Durango.
- Violencia y caos con López Obrador.
El pasado 20 de diciembre, al gobernador bananero priista, Esteban Villegas, le estallaron en la cara las graves acusaciones que hizo el mandatario morenista de Zacatecas, David Monreal, en varios medios nacionales, señalando que funcionarios del gobierno duranguense estarían participando en una banda de secuestradores de inmigrantes.
Las fuertes declaraciones del político zacatecano se dieron luego de la desaparición de ocho ciudadanos ecuatorianos que en su paso hacia los Estados Unidos aparentemente habrían desaparecido en Zacatecas, pero luego de un rastreo de un teléfono celular de uno de los inmigrantes ecuatorianos las autoridades zacatecanas pudieron determinar que estos habían desaparecido en territorio duranguense.
Y cosas mucho más fétidas encontró el gobierno de Zacatecas en sus investigaciones, que llevaron al gobernador David Monreal a realizar esas acusaciones contundentes, pues no es la primera vez que suceden estos actos delictivos.
Por el momento, los ciudadanos ecuatorianos no han aparecido y la información sobre las identidades de esos funcionarios del gobierno duranguense que pertenecen a esa banda de secuestradores la tiene reservada el gobierno de Zacatecas, encabezado por David Monreal.
A estas alturas, la secretaria de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, ya debe tener conocimiento sobre quiénes son esos criminales que operan bajo la protección del gobierno estatal duranguense.
El gobernador bananero Esteban Villegas ha guardado un silencio sepulcral y las obvias sospechas de complicidad o actos de omisión deliberados en relación a estos crímenes recaen sobre el secretario General de Gobierno, Héctor Vela Valenzuela, y el titular de la secretaría de Seguridad Pública, Óscar Galván.
Estos dos personajes cargan a cuestas pesadísimos historiales de corrupción, producto de las gestiones sórdidas que han realizado en anteriores gobiernos estatales priistas y en administraciones del municipio de Durango.
Esta peligrosa ingobernabilidad, provocada por tener a criminales desempeñando funciones públicas, ya fue advertida también por el arzobispo de Durango, Faustino Armendariz, quien esta semana, en entrevista con el “periodista” oficialista Heber García, declaró que en Durango sí hay secuestros y cobros de derechos de piso. El arzobispo Armendariz también ha denunciado cobros de derechos de piso a parroquias en esta entidad norteña.
Lo anterior deja al gobernador de marras, Esteban Villegas, totalmente evidenciado, pues forzosamente debe estar enterado de lo que sucede en la entidad que gobierna, y la disyuntiva no le favorece para nada: O es cómplice de los actos criminales que se cometen en Durango o es un gobernador tremendamente ignorante e incompetente.
Las dos opciones dejan al exporro sanjuanero como un servidor público muy poco confiable, que está poniendo en peligro la vida y la integridad física de los duranguenses.
Así las cosas, a su alcahuetería de tener en su gobierno a expresidiarios defraudadores, a violadores de derechos humanos de niñas y niños y a funcionarios que le dan contratos millonarios y plazas laborales a sus familiares, ahora Esteban Villegas le suma la letal imprudencia de tener en la nómina gubernamental a secuestradores y criminales.
Esteban Villegas ya tocó fondo y no deja de ser candidato a la revocación de mandato, pues ser acusado de graves actos de corrupción como tener secuestradores en su gobierno, por el gobernador de Zacatecas, David Monreal, que ha ocupado mes tras mes el último lugar en aprobación nacional en los resultados de las principales empresas encuestadoras del país, simplemente ya es el colmo.
Otro de los imperdonables es el presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien este fin de semana le ardió su tierra natal, Tabasco, en donde hubo innumerables narcobloqueos, quemas de vehículos, motines y agresiones a la ciudadanía por parte de grupos del crimen organizado.
Estos desmanes revelan la debilidad que tiene el presidente López Obrador frente al crimen organizado, pues en otras épocas en las que imperaba el presidencialismo realmente autoritario era impensable que esto sucediera en el estado natal del presidente en turno.
Lo que sea, las escenas ahí están en las redes sociales y reflejan el fracaso absoluto de López Obrador en materia de seguridad pública y seguridad nacional.
Y así como Tabasco ardió, Guerrero, Michoacán, Jalisco, Zacatecas, Durango, Sinaloa, Baja California, Guanajuato, Chihuahua, Sonora, Veracruz, Chiapas… más del 80 por ciento del territorio nacional está en manos del crimen organizado. Sin embargo, López Obrador no gobierna solo, todas estas entidades tienen a sus respectivos gobernadores, lo que nos demuestra que la clase política mexicana ya es incapaz de gobernar.
Hasta aquí nuestra Tarde de perros con gobernadores delincuentes y torpes; y presidentes de la República fracasados, corruptos y pusilánimes.
