Los aispuristas, repudiados por el electorado

De la redacción de razacero.

Tal vez pensaron que la ciudadanía olvidaría inmediatamente que el sexenio del panista José Aispuro Torres ha sido, hasta el momento, el más corrupto en la historia de Durango y que colaboraron muy activamente con este exmandatario para dejar en la quiebra total las finanzas estatales.

Pero para su desgracia, el electorado tiene muy presente el papel que han desempeñado durante la administración anterior del panista Aispuro Torres y en la actual, del priista Esteban Villegas Villarreal.

Son los aispuristas, los que hoy andan pidiendo el voto y los que son abiertamente repudiados por el electorado, porque en sus discursos prometen hacer todo lo que no han hecho cuando han ocupado curules en el Congreso local y en el Congreso de la Unión, así como cargos relevantes en los gobiernos estatal y municipales de Durango.

Entre los aispuristas más destacados, de los cuales el electorado ya no quiere saber nada, se encuentran:

Alejandro Mojica Narváez, candidato a diputado local del Distrito I, quien busca reelegirse. Hijo del exalcalde priista de Durango, Jorge Mojica Vargas, uno de los principales personeros de la alcaldesa saqueadora de Gómez Palacio, Juana Leticia Herrera, y de Yadira Narváez, directora de la Comisión de Aguas del Estado de Durango, este político se ha caracterizado por servir fielmente a sus intereses familiares y a los intereses de los gobernadores en turno. Durante el sexenio de Aispuro, Alejandro Mojica Narváez ocupó la dirección del Conacyt engrosando la nómina de esta institución de manera deliberada y alarmante. Ahora, en el sexenio del priista Esteban Villegas, como diputado local aprobó todos los latrocinios del exporro estudiantil, como el replaqueo ilegal y los préstamos leoninos que el mandatario ha solicitado a instituciones bancarias, endeudando más al pueblo de Durango.

Fernando Rocha Amaro, candidato a diputado local por el Distrito V, es otro de los aispuristas que pretende reelegirse. Rocha Amaro ha formado parte activa de esa élite privilegiada que se ha beneficiado del poder en esta entidad norteña. Ha sido regidor en el municipio de Durango durante los trienios de los exalcaldes José Ramón Enríquez Herrera y Jorge Salum del Palacio, presidiendo la comisión de Actividades económicas, una de las comisiones en las que se cometen más actos de corrupción en esta demarcación.

Como se sabe en Durango, el exalcalde panista Jorge Salum señaló tácitamente durante su administración al exregidor Rocha Amaro por sus supuestos vínculos con grupos de la delincuencia organizada en el negocio de las licencias para venta de bebidas alcohólicas.

Posteriormente, como diputado local en la LXIX Legislatura del Congreso de Durango, Fernando Rocha Amaro, respaldó al gobierno saqueador del exgobernador José Aispuro Torres en los finales de su sexenio.También, Rocha Amaro ha avalado los abusos que el actual gobernador priista Esteban Villegas Villarreal ha cometido en contra de la ciudadanía duranguense, como el replaqueo; los impuestos cedulares; la imposición de la auditora carnala, Gabriela Gaitán, como titular de la Entidad de Auditoría Superior del Estado; la aprobación de préstamos millonarios y saqueos al erario que este mandatario está perpetrando con los principales integrantes de su gabinete.

Gabriela Vázquez Chacón, candidata a diputada local del Distrito VI, fue directora del Instituto Duranguense de la Juventud, sin pena ni gloria; posteriormente, fue
regidora en el municipio de Durango en los trienios de Jorge Salum y del actual alcalde José Antonio Ochoa, sin ninguna actuación relevante.

Susy Carolina Torrecillas Salazar, candidata priista a diputada local por el Distrito Xlll, también es otra aispurista que quiere reelegirse. Expresidenta del DIF en Lerdo durante el trienio 2019-2022, encabezado por su esposo, el alcalde Homero Martínez, Susy Carolina Torrecillas también fue ferviente apoyadora del régimen aispurista. Fue precisamente su esposo, el alcalde Homero Martínez, quien le cambió el nombre al Boulevard José Santos Valdez para ponerle el nombre de José Rosas Aispuro.

Gina Gerardina Campuzano González, es otra de las aispuristas reconocidas en Durango, quien durante esta campaña electoral para obtener un escaño en el Senado de la República ha evadido hablar sobre la cercanía que tuvo con el exmandatario atracador. Gina Gerardina Campuzano desde 2007 comenzó a formar parte de la clase política corrupta duranguense como regidora del municipio de Durango y como diputada local. En 2021 Gina Gerardina Campuzano llega a la Cámara de Diputados, en donde se caracteriza por denunciar la corrupción del gobierno izquierdista del presidente Andrés Manuel López Obrador, al mismo tiempo que encubre y guarda silencio sobre los saqueos y corruptelas que cometen los gobernantes prianistas José Aispuro Torres y Esteban Villegas Villarreal. La suplente de Gina Gerardina Campuzano como candidata al Senado es María Salomé Elyd Saenz, exRecaudadora de Rentas del gobierno del estado de Durango en el municipio de Lerdo, durante el sexenio aispurista.

Silvia Patricia Jiménez Delgado, candidata a diputada federal por el Distrito 04, al igual que Gina Gerardina Campuzano, esta panista ha sido protagonista de la corrupción en Durango desde el año 2006 en que ocupó una diputación local en el Congreso de esta entidad. De 2010 a 2013 Silvia Patricia Jiménez fue regidora del municipio de Durango para posteriormente ocupar de nuevo una curul local en la actual legislatura (2021-2024). Silvia Patricia Jiménez ha sido fuertemente cuestionada por haber sido una de las beneficiadas en el SEDECOGATE, uno de los actos de corrupción más vergonzosos ocurridos en el sexenio aispurista, en el que durante la pandemia de Covid-19 un grupo selecto de empresarios cercanos al régimen estatal panista fueron beneficiados de manera irregular con préstamos que alcanzaron la cifra de hasta 500 mil pesos por empresario.

Verónica Pérez Herrera, candidata panista a diputada federal plurinominal, ha sido dirigente de su partido, el PAN, y diputada local en esta LXIX legislatura. Lo más trascendente que ha hecho Verónica Pérez Herrera es registrarse indebidamente en esta contienda electoral usurpando una candidatura a diputación federal plurinominal en acción afirmativa a personas de la diversidad sexual.

Lo grotesco y ofensivo de esto es que la panista Verónica Pérez para nada pertenece a la comunidad LGBT y como diputada local votó en contra del matrimonio igualitario, abonando a que el Congreso de Durango siga siendo uno de los más retrógradas de la República mexicana por negar reiteradamente el reconocimiento y respeto a los derechos humanos y civiles de la comunidad LGBT.

Y por último tenemos al impresentable panista Francisco Londres Botello Castro, candidato a diputado federal plurinominal. Este personaje sórdido fue uno de los más beneficiados de la corrupción durante el sexenio del exgobernador saqueador José Rosas Aispuro Torres.

Francisco Londres Botello, cuñado del “Hombrecito de Tamazula”, fue titular de la Comisión Estatal de Suelo y Vivienda en los inicios del sexenio aispirista, en donde se caracterizó por hostigar laboralmente a los trabajadores de esta institución, especialmente a los dirigentes del Sindicato Independiente de la COESVI, a quienes les violaba constantemente sus derechos humanos y laborales.

Posteriormente, Francisco Londres Botello fue regidor del municipio de Durango, en el trienio 2019-2022, en el que fue exhibido por el exalcalde Jorge Salum.

Al igual que con Fernando Rocha Amaro, el entonces alcalde Jorge Salum se refirió tácitamente al exregidor Francisco Londres Botello por tener supuestos vínculos con grupos de la delincuencia organizada en el control de las licencias para venta de bebidas alcohólicas.

Estos son, a grandes rasgos, los candidatos aispuristas que en esta campaña se han atrevido a pedirle el voto a la ciudadanía duranguense y han sido repudiados.

“Se puede engañar a algunos todo el tiempo y a todos algún tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo”, Abraham Lincoln.