Narcogobernador Villegas, bajo el amparo de la 4T | El inminente fin del PRI en Durango | Luisa Alcalde y los morenos del Bicentenario
- Narcogobernador Villegas, bajo el amparo de la 4T.
- El inminente fin del PRI en Durango.
- Luisa Alcalde y los morenos del Bicentenario.
Continúa el narcogobernador duranguense Esteban Villegas promocionando las mentiras de su “segundo informe” en sus redes sociales, falsedades que ya quedaron más que evidenciadas, tanto por expertos financieros que lo despedazaron en medios nacionales respecto a sus supuestos logros en este rubro como por la ciudadanía que está viendo de cerca cómo “gobierna” este sátrapa incompetente: con replaqueos ilegales, imposición de impuestos leoninos, más y más créditos multimillonarios para aumentar la deuda de esta entidad y saqueos, muchos saqueos de su muy cercana élite de compadres y factureros.
Y quizá por estas “virtudes”, el narcogobernador bananero priista, Esteban Villegas, fue invitado este fin de semana por el corruptísimo presidente “izquierdista”, Andrés Manuel López Obrador, para hacer un recorrido por la península de Yucatán en el Tren Maya.
Por ahí anduvo el narcogobernador Villegas, en medio de gobernadores de la 4T tan corruptos como él, dando el mensaje de que ya cuenta con la protección del grupo gobernante hegemónico y también dando el mensaje de que entregará al morenismo la totalidad de posiciones políticas en los próximos comicios electorales: alcaldías en 2025 y gubernatura en 2028.
Como se sabe, la imposición de este narcomandatario en la gubernatura de Durango fue producto de una negociación pactada entre el capo Ismael “El Mayo” Zambada y el presidente “izquierdista” López Obrador. Y fue “El Mayo Zambada” quien habría financiado toda la campaña del exporro estudiantil sanjuanero.
Sin embargo, será la presidenta electa Claudia Sheinbaum quien decida en su sexenio si refrenda este pacto mafioso heredado por su antecesor y le otorga impunidad total a este narcogobernador duranguense o le aplica la ley y lo envía a la cárcel por la cantidad de latrocinios que ha cometido apenas en el segundo año de su gobierno y que con seguridad seguirá cometiendo en los cuatro años que le restan, a reserva de que Claudia Sheinbaum lo pare en seco en cuanto asuma la presidencia de la República este próximo 1 de octubre.
En lo que no hay especulaciones es en el inminente fin del priismo duranguense, que con la postura servil de su practicamente último “jefe político”, el narcogobernador Villegas, está viendo ya su extinción, pues a duras penas este partido llegará con vida a las elecciones de 2028.
Y ya ungida como dirigente nacional del partido Morena, con la supervisión de Andy López Beltrán, hijo del jerarca, Luisa María Alcalde Luján deberá vigilar con lupa a los morenistas duranguenses, en especial a los llamados “Morenos del Bicentenario”, un pequeño grupo ya bien identificado de dirigentes locales de este partido y legisladores que desde hace un buen tiempo han venido acatando al pie de la letra las órdenes que salen de la oficina principal del Centro de Convenciones Bicentenario, es decir, la oficina del gobernador en turno de Durango.
El sexenio pasado, estos legisladores y dirigentes locales de Morena, “Los Morenos del Bicentenario”, obedecieron al panista José Rosas Aispuro; ahora, en la actual administración, lo hacen con el narcogobernador priista Esteban Villegas.
Una de ellas es la diputada más corrupta en la historia de Durango, Sandra Amaya, quien se ha caracterizado por su marcada opacidad, al grado de estar denunciada en la Fiscalía Anticorrupción por el delito de enriquecimiento ilícito.
En la pasada LXIX legislatura del Congreso, con Sandra Amaya en la presidencia de la JUCOPO, fueron muchas las anomalías que quedaron ocultas, llegando al extremo de clasificar información pública como “reservada” para evitar que la ciudadanía conociera los desaseos que se cometieron.
Uno de estos desaseos es el de los famosos 30 “aviadores” del Congreso, que la misma diputada corrupta Sandra Amaya denunció el 4 de octubre de 2023, un mes después de asumir la presidencia de la JUCOPO, en el último año de la pasada legislatura. Sin embargo, y de acuerdo a fuentes internas del Congreso de Durango, fue la misma diputada Sandra Amaya quien ordenó el mes de enero de 2024 clasificar la información del expediente número OIC/JAI/001/23, que contiene expedientes laborales del personal adscrito al Congreso, en la modalidad de “reservada por un año”, para que los ciudadanos que solicitaron esta información pública a través de la Plataforma Nacional de Transparencia no se enteraran de los nombres de esos “aviadores” y de los sueldos que estuvieron percibiendo de manera ilegal en el Congreso. Así las cosas, hasta enero de 2025 los ciudadanos duranguenses sabremos quiénes eran o son esos 30 “aviadores” agraciados.
Hoy Sandra Amaya sigue siendo diputada y este es su tercer trienio ocupando una curul en el Congreso de Durango, sirviendo a los intereses del prianismo duranguense y aumentando su fortuna personal, todo a nombre de la 4T.
Y hasta aquí nuestra Tarde de perros con narcogobernadores priistas cobijados por el lopezobradorismo; partidos tricolores ya casi extintos y líderes nacionales morenistas que tal vez sigan solapando a sus corruptos compañeros duranguenses.