
Carta abierta de la familia Fragoso a la ciudadanía de Durango
Carta a los medios de comunicación de Durango
A la opinión pública y a los honorables medios de comunicación del Estado de Durango:
Desde los albores del Virreinato, cuando la tierra de la Nueva Vizcaya comenzaba a forjarse con sudor y esperanza, el apellido Fragoso se convirtió en sinónimo de honor, esfuerzo y servicio. Nuestros antepasados, agricultores y ganaderos primero, comerciantes y empresarios después, cimentaron con su labor el prestigio de una familia que nunca se apartó de los valores de la rectitud, la palabra empeñada y la fidelidad a su tierra.
Durante el Porfiriato, época de modernización y de impulso económico, los Fragoso supimos estar a la altura de los tiempos. Participamos con nuestras manos y nuestro ingenio en el crecimiento productivo de la región, contribuyendo al bienestar de la sociedad duranguense. Nuestro apellido quedó asociado a la tenacidad en el trabajo, a la prudencia en los negocios y a la dignidad en el trato humano.
Hoy, cuando evocamos con orgullo los siglos de historia que nos preceden, nos duele constatar que alguien que porta nuestro apellido ocupa un lugar dentro del Gabinete Estatal, sin conducirse con la altura moral, la prudencia ni el decoro que la historia de la familia reclama y que la función pública exige. Nada hiere más a un linaje honorable que ver mancillado su nombre por actitudes que no corresponden al legado recibido.
Queremos dejar claro, ante la sociedad duranguense, que la familia Fragoso permanece fiel a sus raíces: seguimos siendo los hijos de agricultores, ganaderos, comerciantes y empresarios que, con honestidad y con empeño, forjaron el presente que hoy disfrutamos. No permitiremos que la memoria de nuestros antepasados quede confundida con actos individuales que no reflejan el verdadero espíritu de nuestro linaje.
El nombre Fragoso no pertenece a un cargo ni a una persona, sino a la historia de un pueblo y de una familia que ha sabido servir con honor desde hace más de tres siglos. Esa es la herencia que defendemos y esa es la voz que hoy alzamos.
La familia Fragoso