A las jóvenes locutoras de Milenio las obligan a vomitar sapos y a repetir mentiras y exageraciones
Noticieros para desinformar a la ciudadanía, negocio jugoso de los emporios televisivos.
Pedro Echeverría V.
- Pienso que hasta los años 70 los escritores y periodistas fueron autodidactas, es decir, se hicieron por gusto, leyendo, observando y cometiendo mil errores; a partir de los 80 comenzaron a salir del horno los títulos para ejercer y escalar en el mundo académico y del trabajo. Ningún periodista fue mejor o peor, unos más pensadores otros más pragmáticos; solamente recibieron en su momento lo que la sociedad pudo darles. Hoy quizá el 95% tiene título para ejercer, pero tanto viejos y jóvenes -para asegurar su empleo y sus ingresos- tienen que investigar, escribir o informar bajo las órdenes de la empresa. No es un asunto de decir “la verdad” sino interpretarla de acuerdo con la política empresarial. El que paga manda.
- El telenoticiario de Milenio que descubrí hace unos meses en Internet -después que fue cesada Carmen Aristegui en su noticiario crítico y valiente por el gobierno de Peña Nieto- pensé que por nuevo y muy juvenil, podría ser menos peor que los noticiarios de Televisa, Tv Azteca o Tele Fórmula; sin embargo, me bastó ver que quien lo dirigía es el mismo Carlos Marín del grupo Televisa para no confiar. Pues bien, a las agradables locutoras: Magda, Tania, Azucena, Claudia, etcétera, siguiendo informaciones de la más baja calidad, las obliga la empresa a vomitar informaciones contra los maestros de la CNTE, a entrevistar a personajes nefastos como X González, a perseguir noticias no edificantes y a desprestigiarse ante su público.
- Obviamente, los López Dóriga, Marín, Loret de Mola, Gómez Leyva, Alatorre, el Brozo, por su años hablando de lo mismo, están acostumbrados a tragar sapos, hacerlos crecer en su organismo y a vomitarlos; pero esas pobres jóvenes locutoras de Milenio dan tristeza porque (por ahora) las obligan. Pero, ¿qué hacer -preguntan las y los periodistas- si la TV, la Radio y la Prensa son empresas que obligan a sus trabajadores a pensar para ellos? Dicen muchos periodistas que ellos “sólo informan lo que ven”, pero no se dan cuenta que lo que ven y escuchan es con los ojos, los oídos y la ideología de la empresa. Parecería obligatorio que los periodistas se agrupen y organicen en sindicatos para adquirir independencia y estabilidad.
- ¿Por qué en México y en el planeta casi todos los medios de información son de derecha y sólo hay unos poquitos -contados con los dedos- que se dediquen a defender a los trabajadores y sus luchas por cambiar el mundo? La respuesta es la más obvia del mundo: porque los medios de información son propiedad de empresarios millonarios subsidiados por el sistema capitalista y porque las agencias de recolección y venta de información como la AP, UPI, Reuter, etc., están en manos imperialistas. ¿Por ello esconden todos los latrocinios, desfalcos y enriquecimiento de los gobiernos y funcionarios, dedicándose a calumniar a todos los trabajadores tergiversando y exagerando sus errores y “malas” actuaciones?
- Esas empresas de “información” persiguen con sus cámaras, denuncian y hacen escarnio contra los sectores humildes: madres, maestras, jóvenes y niñas agrandándoles sus errores o problemas surgidos por vivir en las peores condiciones de miseria; se han lanzado contra los maestros y maestras “buscándoles cinco pies al gato”, como el caso de Rubén Núñez y el de la maestra de Chimalhuacán. Pero cuando los millonarios y sus junior violan, roban, desfalcan, se llevan su capital a otro país, asesinan y huyen de la justicia no dicen absolutamente nada los medios, y se unen para silenciarlo. ¿Alguien todavía duda que los medios de información estén al servicio total del poder político y económico, siendo parte de ellos?
- Tengo la convicción de que más temprano que tarde periódicos como La Jornada, revistas como Proceso, la UNAM, la UAM, UCDM y organizaciones sociales como la CNTE, electricistas, telefonistas, mineros, etc., tendrán los recursos, la unidad y la fuerza para crear un noticiario totalmente independiente, como el de Carmen Aristegui, para superar a cualquier empresa privada o al gobierno. Los partidos políticos, como organismos controlados, jamás pensarán en esta idea de independencia. ¿Por qué Aristegui y sus asesores no lo han visto por aquí dejando de confiar en Supremas Cortes, Ejecutivos y Legislativos? En vez de analizar y discutir problemillas hay que pensar en enterrar a los medios burgueses de información.
- ¿Cómo acabar con las mentiras y calumnias de los medios de información que buscan idiotizar al pueblo en medio de su miseria y desgracia? Se han practicado positivamente decenas de bloqueos, se han pintado sus paredes, se les ha mentado la madre a los empresarios, pero de allí no se ha pasado. Ellos -los televisivos, las radios y casi todos los medios escritos- por el contrario, cada minuto ofenden al pueblo con sus calumnias y sus programas lesivos a las mentes de todos los mexicanos. Podemos hacer mil llamados para que no vean esas basuras de entretenimiento imbécil, pero nuestros llamados son inaudibles y casi inexistentes. Hay que hacer algo contra esos medios que bloquean y desvían las mentes de nuestro pueblo.