México, campeón de asilo. Desde 1982 es un gobierno que se arrastra ante EE.UU.
Pedro Echeverría V.
- Aplaudí mucho, me alegró la noticia de que un juzgado mexicano haya determinado que es improcedente la petición del gobierno de España de extraditar al inmigrante vasco Hilario Urbizu por ser integrante de la organización ETA y por haber participado indirectamente en un atentado en Navarra hace 35 años. ETA (me indigna) ha sido calificada de “terrorista” por los gobiernos y empresarios españoles, yanquis, franceses, etcétera, por el hecho de luchar desde hace más de 50 años por su independencia de España. Me recuerda que México logró su independencia de España en 1821 y cuando luchaba por ella también Hidalgo, Morelos, Mina y Guerrero, fueron acusados de terroristas. En España y todo el mundo los que luchamos contra el capitalismo “somos terroristas”.
- México, en otros tiempos, fue campeón de la dignidad al otorgar asilo a decenas de miles de perseguidos por gobiernos dictatoriales y asesinos; sin embargo, a partir de 1982 los gobiernos mexicanos actuaron como gusanos arrastrándose bajo las órdenes del amo imperial. No olvido que los gobiernos priístas y panistas de los últimos 30 años han entregado a todos los asilados, sobre todo a los gobiernos españoles. A pesar que las vasca, catalana, gallega y andaluz, son consideradas nacionalidades históricas y comunidades autónomas, con identidad colectiva, lingüística y cultural que durante muchos años han batallado por su independencia y autonomía, el ETA ha sido perseguido, encarcelado y asesinado, y no ha tenido más remedio que defenderse con las armas.
- También el asilo político parece ser un reflejo directo de la lucha de clases; no podría ser de otra manera. Los yanquis mantienen asilados o escondidos en su país a miles de personajes que han defraudado a grandes empresas o que en nombre de la libertad y la democracia capitalista han asesinado. El asilo mexicano, por el contrario, parece haber favorecido a los luchadores sociales perseguidos por dictaduras al estilo Franco, Pinochet, Videla, etc. El asilo a los débiles le ha dado a México un maravilloso prestigio mundial, por lo menos hasta los tiempos de los nicaragüenses, salvadoreños y guatemaltecos.
- Aunque México es producto de una revolución burguesa (1910-1917), su
política de asilo fue adecuada desde los años 20 al menos: encontraron refugio y libertad en México el nicaragüense César Augusto Sandino, el venezolano Carlos León, el peruano Víctor Raúl Haya de la Torre, los cubanos Julio Antonio Mella y Antonio Guiteras, y otros muchos de menor nombradía. Tradición singular, tuvo su momento culminante en la apertura de México al exilio republicano español a mediados de los años 30, en los tiempos del presidente Lázaro Cárdenas. En diciembre de 1936, antes de que estallara la tragedia española, dio Cárdenas asilo político a León Trotsky, a quien ningún gobierno quería proteger. Este fue asesinado en 1940 por gente de Stalin.
- Hasta 1982 México dio cobijo y protección a los perseguidos por las dictaduras militares latinoamericanas: chilenos, argentinos, brasileños, bolivianos, uruguayos, colombianos, guatemaltecos, nicaragüenses y salvadoreños; la entera geografía de la persecución política en América Latina encontró asilo y refugio en este país, bajo gobiernos mexicanos que no dejaban de ejercer aquí sus propias modalidades represivas. Hoy México no solo no proporciona asilo político adecuado, sino que no hay muchos que lo soliciten por no tenerle confianza. ¿Tú pedirías asilo a México si eres un luchador social anticapitalista? Obviamente que ni debes pensar en ello porque México ha demostrado ser un simple sirviente de los intereses del gran capital internacional.
- ¿Puede olvidarse que hoy Ecuador y Rusia protegen a los héroes asilados Assange y Snowden en sus territorios por ser perseguidos del gobierno yanqui? ¿Puede olvidarse que gracias a ellos el mundo se ha enterado con mayor profundidad de las guerras, intervenciones y saqueos del imperio en cientos de países del mundo? Por sólo ese hecho Ecuador y Rusia son países confiables -como lo fue México durante décadas- para quienes luchan por la transformación social y política en el mundo. Tengo confianza en que México -como producto de las luchas sociales- recupere el prestigio que alguna vez tuvo. Quizá en materia de asilo no necesariamente haya que esperar una gran revolución social.
- Impidamos que los gobiernos de México sigan siendo destructores del prestigio que durante muchas décadas tuvo el país en materia de asilo. Exijamos respeto a los luchadores sociales de todo el mundo a quienes se les han inventado “actos terroristas”, tal como sabemos que sucede en México como pretexto para asesinarlos. ETA lleva más de medio siglo en las batallas, protestas y luchas en las calles exigiendo su autonomía. Han sido asesinados miles de etarras y las cárceles españolas están llenas de luchadores sociales del país vasco que no quieren ser españoles sino vivir su autonomía, tal como México lo logró a principios del siglo XIX.
- Los terroristas no son los que se defienden, sino los gobiernos y empresarios que siguen saqueando las riquezas de España.