Los gobernadores más endeudados

Jorge Herrera Caldera, gobernador de Durango, de septiembre a diciembre de 2015 adquirió una deuda de 2,261 millones de pesos, equivalente al 32.3% de la deuda total del estado, que asciende a 7 mil millones de pesos.
Jorge Herrera Caldera, gobernador de Durango, de septiembre a diciembre de 2015 adquirió una deuda de 2,261 millones de pesos, equivalente al 32.3% de la deuda total del estado, que asciende a 7 mil millones de pesos.

Los gobernadores de los estados se endeudan sin consecuencias legales y sin castigo por parte del electorado, coincidieron expertos consultados por EL UNIVERSAL. De acuerdo con un análisis elaborado por este diario de las deudas subnacionales y entrevistas con expertos, los 12 estados donde habrá elecciones el próximo 5 de junio para cambio de gobernador no serán afectados en su imagen ni en la orientación del voto por las deudas contraídas.

Veracruz (45 mil mdp), Chihuahua (42 mil mdp), Quintana Roo (22 mil mdp), Oaxaca (13 mil mdp) y Tamaulipas (12 mil mdp) encabezan la lista de las cinco entidades con el mayor monto de deuda, de acuerdo con datos recabados por este diario de la base de datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

Les siguen Puebla (8 mil mdp), Zacatecas (7 mil mdp), Durango (7 mil mdp), Hidalgo (6 mil mdp), Sinaloa (4 mil mdp), Aguascalientes (3 mil mdp) y Tlaxcala (33 mdp).

Investigadores y académicos consultados coincidieron en que más que afectar el endeudamiento a su imagen pública, los gobernadores aprovechan el dinero líquido para hacer obras o infraestructura nueva y así llegar a los comicios con un electorado aparentemente contento, pero endeudado.

“No hay una percepción informada sobre la deuda. No es un elemento que incida en la orientación o en la preferencia electoral, salvo que en las campañas fuera algo que se destacara mucho”, afirmó Jacqueline Peschard, investigadora de la UNAM.

“No les interesa en un país donde menos de la mitad de la población no paga impuestos. No van a absorber el costo. Tiene que ver con inequidad fiscal. Nadie paga con consecuencias legales. A nadie le importa; le importa a un segmento reducido. Los habitantes de Coahuila o Veracruz no sienten el problema. Por eso es que no hay consecuencias”, advirtió Luis Carlos Ugalde, director general de Integralia Consultores y ex consejero presidente del IFE.

Incremento explosivo

En los últimos cinco años, el nivel de endeudamiento de los estados creció cuatro veces más que los ingresos que reciben las entidades por concepto de participaciones federales, de acuerdo con el experto Kristóbal Meléndez, del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria, A.C. (CIEP). “Y a eso hay que añadirle el componente electoral”, mencionó el especialista.

“Ahorita, con las elecciones hay que tener cuidado, hay que estar viendo cómo incrementa la deuda. Un ejemplo es Durango, que tendrá elecciones este año. Tan sólo de septiembre a diciembre de 2015 aumentó 32.3% su deuda. El caso de Oaxaca subió 16.76%. Es un crecimiento considerable en tan poco tiempo”, explicó.

Javier Duarte, de Veracruz; César Duarte, de Chihuahua, y Roberto Borge, de Quintana Roo, son los tres gobernadores que encabezan la lista por ser los mandatarios que, durante su sexenio, incrementaron de manera exponencial la deuda en sus respectivas entidades, de acuerdo con los reportes de la Secretaría de Hacienda.

El resto de los estados que tendrán elecciones, como Oaxaca y Tamaulipas, superan en 12 mil millones de pesos su deuda. En el caso de Puebla, Zacatecas, Durango, Hidalgo, Sinaloa y Aguascalientes, aunque no rebasan el promedio de endeudamiento de las 32 entidades federativas, su deuda rebasa los 3 mil millones de pesos cada una.

El único caso atípico es el de Tlaxcala, que su deuda no supera los 33 millones de pesos. Todas estas entidades tendrán elecciones para gobernador este año.

¿Cómo se endeudan?

Los gobiernos de los estados deben solicitar permiso a los congresos locales para endeudarse, y en algunos casos lo hacen a través de fideicomisos o fondos que abren para que los bancos acepten darles los recursos, siempre y cuando pongan algo en prenda.

Estos recursos en prenda por lo regular son las participaciones federales o impuestos locales. Para que los gobernadores puedan endeudarse deben hacerlo con permiso de sus congresos.

Por eso, Luis Carlos Ugalde menciona que el Poder Legislativo en cada una de las entidades no ha actuado como un real contrapeso y ha permitido que se endeuden sin límites.

“Los actores responsables tendrían que hacer su trabajo. Los diputados no hacen control financiero del gasto público. Si no hace su trabajo el Legislativo, el Poder Ejecutivo en los estados puede hacer cualquier cosa, como abrir fideicomisos y contratar deuda con bienes productivos, entre muchas otras cosas”, explicó.

(Fuente: El Universal).