Ahora me robé un hipopótamo

Los incansables “asesores ambientalistas” del alcalde de Durango, José Antonio Ochoa, nuevamente creen tener sus mentes iluminadas y difunden una nueva acusación falsa e inmoral en mi contra para intentar amedrentarme, ahora acusándome de desaparecer un hipopótamo (¡válgame Dios! ¡hasta donde llegué!), acto que provocaría envidia del gran mago Houdini, el más famoso de todos los tiempos.

Esto me sigue dando la oportunidad de hacer evidente la ignorancia, torpeza y flojera mental que poseen estos “ambientalistas”, que no son capaces de hacer una investigación profesional.

En la historia del Zoológico Sahuatoba de Durango solo han existido 5 hipopótamos: el primero, conocido como “El Güero”, era tan dócil y querido que los visitantes se tomaban fotos con él, falleció en 2003; posteriormente, en 2004, se trae del Bioparque Estrella una pareja de hipopótamos de 6 años de edad, y el macho fallece en el 2010. Estos decesos son registrados en los informes anuales de esos años ante la SEMARNAT. Al quedar sola la hembra, en la administración del 2016 traemos de Veracruz un macho juvenil de un año y un peso de 800 kilos, con la intención de llevar a cabo su reproducción, lo cual se logró después de 8 meses de gestación, y en un proceso de espera de más de 2 años nace el quinto hipopótamo, que desafortunadamente muere por descuido y negligencia en la administración actual, aunado a la ignorancia del ex director Karlo Sánchez Gama, por lo que un grupo de ciudadanos nos manifestamos afuera del zoológico y lo clausuramos.

Todos estos ejemplares estan registrados por la PROFEPA. Hoy, la acusación de desaparecer un hipopótamo es absurda, ya que para trasladar un hipopótamo que en promedio pesa 2.5 toneladas se requiere de un transporte especial y grúas, sin mencionar la gran cantidad de testigos inevitables (testigos que no han presentado porque no los hay).

La foto que aquí anexo es del primer hipopótamo que muere en el 2010 y tendría que haber resucitado en el 2016, ¡solo así pudiera haber tenido un hipopótamo para desaparecerlo!

Puede ser una imagen de 4 personas y texto

Primero desaparecí un tigre y dos jaguares y los vuelvo a aparecer en 2019 en la entrega-recepción; después desaparezco un hipopótamo y lo vuelvo a aparecer en el 2010 cuando fallece . Esto solo es propio de un espectáculo de Las Vegas o de una novela chafa de ficcion, mejor sería que leyeran las obras de ciencia ficción del ruso Isaac Asimov para que de menos cultiven su intelecto un poco.

Es tan fantasiosa la versión de estos “ambientalistas” farsantes al servicio del alcalde José Antonio Ochoa, que por años, al no entender el proceso de intercambios, han acusado a los zoológicos que pertenecen a la AZCARM (Asociación de Zoológicos Criaderos y Acuarios de la República Mexucana) de practicar el tráfico de animales. ¡Son unos hipócritas! Solo así se explica que hayan recibido hace un mes a los directores de zoológicos pertenecientes a esta asociación, quienes fueron invitados para hacer su reunión anual en esta ciudad, acto que José Antonio Ochoa aprovechó de manera oportunista para proyectar un supuesto arropamiento y protección de la AZCARM ante los constantes señalamientos de la ciudadanía por los actos de corrupción y negligencia que han sucedido en el Zoológico Sahuatoba durante su administración.

Para finalizar, señalo que solo hago esta aclaración porque los duranguenses merecen respeto y tienen derecho a saber la verdad.

                                                                                                  Atte.

Ernesto Nicolás Cabral Ortiz, exdirector del Zoológico Sahuatoba.