El narcocandidato panista, José Antonio Ochoa, y su saqueador favorito, Ignacio Orrante
Fernando Miranda Servín
En el ámbito político duranguense, sigue resonando el grave señalamiento que el exalcalde del municipio de Durango, Jorge Salum, hizo sobre su sucesor, el panista José Antonio Ochoa, en 2023, revelando públicamente que José Antonio Ochoa Rodríguez, quien fungió como su coordinador de campaña, le propuso recibir financiamiento de grupos delincuenciales para solventar su campaña electoral, para ser alcalde de Durango en el trienio 2019-2022.
Ya encaramado en el poder, para nadie fue un secreto la injerencia de poderes fácticos que José Antonio Ochoa permitió en su gobierno.
Esto y su relación de sumisión y vergonzosa obediencia con el narcogobernador priista Esteban Villegas le allanaron el camino para cometer todo tipo de latrocinios con el erario del municipio de Durango.
Y para llevar a cabo este saqueo sistemático del presupuesto, el narcoalcalde José Antonio Ochoa contó con la complicidad del peligroso saqueador aispurista, Ignacio Orrante Ramírez, exsubsecretario de Administración en la secretaría de Finanzas durante el sexenio del panista ladrón José Rosas Aispuro.
Ignacio Orrante fue designado por el narcoalcalde panista José Antonio Ochoa como director de Finanzas del municipio de Durango, cargo que ocupó desde el inicio de su trienio, en 2022, hasta finales de 2024, cuando fue nombrado por el narcoalcalde José Antonio Ochoa como “coordinador de gabinete”.
Durante su “gestión” como director de Finanzas del municipio de Durango, Ignacio Orrante fue señalado por perpetrar saqueos millonarios, desde el contrato leonino de arrendamiento de las famosas “patrullas perronas”, que tuvo un sobreprecio de más de 65 millones de pesos, hasta la desaparición de contratos en la dirección de Comunicación Social, que ascienden a más de 24 millones de pesos (ver nota Opacidad en Comunicación Social del municipio de Durango).
Por el asunto de las “patrullas perronas”, Ignacio Orrante fue denunciado en la Fiscalía General de la República, por el conocido abogado duranguense Antonio Rodríguez Sosa, mientras que el saqueo de 24 millones de pesos en la dirección de Comunicación Social permanece impune.
También, Ignacio Orrante está denunciado en la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción por haber perpetrado un fraude superior a los 32 millones de pesos al celebrar un contrato amañado para la adquisición de placas y calcomanías de verificación vehicular, durante el sexenio del panista José Rosas Aispuro (ver nota Denunciado ante la FECCED, exsubsecretario de Finanzas de Aispuro).
Hoy, Ignacio Orrante es uno de los integrantes de la planilla del narcocandidato panista a la alcaldía de Durango, como suplente del Primer regidor, Giovanni Rosso, y funge también como el principal operador político del narcocandidato José Antonio Ochoa, por lo que se presume que todos los recursos financieros que este peligroso saqueador ha sustraído del municipio de Durango serán utilizados en esta campaña electoral para conseguir votos a favor del narcocandidato panista José Antonio Ochoa, con el objetivo de lograr la reelección y seguir saqueando el erario de la capital duranguense.