¿Y dónde está el Fiscal?
De la redacción de razacero.
En una entrevista concedida a un medio de comunicación local, el Fiscal General del estado de Durango, Lic. Ramón Gerardo Guzmán Benavente, declaró: “no es delito portar placas apócrifas, solamente investigaremos a taxistas piratas cuando cometan delitos”. Pero en los hechos resulta que las placas están catalogadas como documentos oficiales, por lo tanto, falsificar placas de taxis o utilizar placas apócrifas es un delito, pero para el Fiscal General de Durango este delito no existe.
Quizá por esta razón en las principales ciudades de Durango abundan los choferes que conducen vehículos con placas falsificadas, a pesar de los reportes que el subsecretario de Transportes del estado de Durango, Lic. Jorge Campos Murillo, dice le envía con frecuencia al Fiscal General para combatir este delito.
Este comportamiento omiso del Fiscal General de Durango no solo lo practica en esta problemática sino en todas las áreas que le corresponden, y las estadísticas más recientes así lo confirman pues, como se dio a conocer en un importante medio de radiodifusión nacional, Durango, con esta nueva administración encabezada por la coalición PAN-PRD, ya ocupa los primeros lugares en el país en cuanto a inseguridad se refiere.
Al respecto, el periodista Eduardo Ruiz Healy dio a conocer estos resultados verdaderamente preocupantes que solamente comprenden el primer trimestre de 2017:
“En tasas por cada 100 mil habitantes la tasa de secuestros aumentó un 500%, que es el incremento más alto del país, a 0.33% por cada 100 mil habitantes, arriba del promedio nacional que es de 0.24%; los delitos patrimoniales aumentaron de 7.3% a 92%, más del doble del promedio nacional de 45%; la tasa de delitos sexuales subió 22%, de 2.5 a 3.1 puntos; la tasa del delito de lesiones se incrementó 26%, o sea 63 puntos, superior a los 33 puntos del promedio nacional; y la tasa total de delitos aumentó 24%, es decir 159 delitos cometidos por cada 100 mil habitantes, arriba del promedio nacional de 137, y estas estadísticas corresponden de enero a marzo de este año”, puntualiza el periodista Eduardo Ruiz Healy.
Otros datos que se suman a estas estadísticas desastrosas son la carencia de resultados en la resolución de delitos como homicidios, robos a casa habitación, asaltos y robo de vehículos.
Entre los casos más sonados se encuentra el homicidio del empresario Rogelio Alcántar Leyva, de 60 años, asesinado el pasado 12 de abril en el Fracc. Real del Prado, y el asalto a la joyería Mario Ramos, del Paseo Durango, realizado el 20 de abril. Hasta la fecha, el Fiscal General de Durango no ha entregado resultados satisfactorios sobre estos delitos.
A principios de este año se reportaron 2 mil 814 denuncias en la Fiscalía de Durango, de las cuales la mayoría, 968, fueron por robo, y el 90% de estos casos no ha sido resuelto.
Así las cosas, la total ausencia de operatividad que actualmente tiene la Fiscalía General de Durango bajo el mando del Lic. Ramón Gerardo Guzmán Benavente es uno de los principales factores que está contribuyendo al aumento desmedido de delitos, y la situación se torna mucho más grave cuando se sabe que los mandos operativos de la Fiscalía son los mismos que han permanecido en sus cargos desde el sexenio pasado.
Mucho es lo que le está quedando a deber el Fiscal Guzmán Benavente a la ciudadanía, y muchas son las explicaciones que tendría que darle a los contribuyentes que pagan su ostentoso salario pues, por lo que se ve a simple vista, este Fiscal no recorre las calles de la ciudad de Durango para cerciorarse de lo que sucede en muchas de sus esquinas a plena luz del día, y si lo hace se hace de la vista gorda seguramente por lo bien que le está yendo económicamente.